¡Felices fiestas!

El arranque del cotejo le perteneció al dueño de casa. Plantado en zona y cortándole los caminos hacia el cilindro a Libertad, el conjunto albo se disparó al frente por 9 a 1 en poco más de dos minutos, aprovechando un flojo balance propuesto por su rival, y una efectividad que lo acompañó de buena forma a lo largo de los primeros 20.

Para el cuadro de Sunchales no hubo rotación de banco que le diera la fórmula del cambio. Si bien Pelussi comenzó a mostrar lo que sería a la postre, el resto del equipo se ahogó en ofensivas poco dinámicas, las cuales al no poder colocar en su mayoría el balón en la pintura, morían en la monotonía de un tiro largo de poca puntería.

Manteniendo sus argumentos en alto, el equipo bahiense siguió siendo productivo, y recostado en un eficaz resguardo de su cilindro, cerró el primer chico a su favor 25 a 15.

En el segundo cuarto el trámite no varió demasiado, aunque sí desnudó completamente la dependencia del elenco santafesino sobre la figura de Pelussi. El “gringo” terminó la primera etapa con 19 unidades, al tiempo que el resto de sus compañeros aportaron tan solo 12.

La brújula del cotejo no estuvo en manos del visitante, al menos en ese cuarto. El albo continuó repartiendo el goleo, y comprendiendo lo que le iba pidiendo el match según las circunstancias. Aferrado a un tiro exterior potable (5 de 11), los bonaerenses obligaron a su adversario a salir de la zona que buscó imponer, y en defensa hombre, los de Parola no se sintieron seguros tampoco.

Si bien Estudiantes llegó a tener una diferencia de 16 (40 a 24), una ráfaga de Libertad (siempre vía Pelussi) achicó la breca, pero un atinado tiempo muerto pedido por Richotti le puso paños fríos a la situación y el local terminó recomponiendo su imagen y yéndose al descanso largo en ventaja, 45 a 31.

La vuelta de vestuarios pareció traer consigo nuevamente la calma para las filas anfitrionas. Si bien el cuadro de Sunchales volvió a probar con la defensa zonal, el dueño de casa se asemejó al del primer cuarto (gran trabajo de Amicucci y Barrera), y sin resquebrajarse sacó 18 de luz (53 a 35) en dos minutos y medio; aprovechándose de un rival que no acertaba desde afuera y carecía de resguardo inmediato en su terreno.

A pesar de ese mal arranque, no todo fue negro en el horizonte de los dirigidos por Parola. A diferencia de la primera mitad, en el tercer capítulo saltaron en escena Profit, Wolkowyski y Moldú, y entre los tres se cargaron a su elenco al hombro y le dieron vida. El americano se encendió, el interno tomó preponderancia en el juego, y el perimetral salió a romper esquemas, y con ello, el dueño del “Hogar de los Tigres” quedó a solo cuatro (64 a 60) a menos de un minuto para ingresar al epílogo.

Cuando el partido se encausaba como tal, luego de un monólogo albo desde el inicio, los jueces, con su pobre actuación (una más y van), afearon el espectáculo. El trámite se volvió friccionado por demás, y en el revuelo el que salió ganando fue el huésped.

Si bien se mantuvo al acecho por gran parte del cuarto periodo, recién a falta de 13.7 segundos Libertad logró igualar las acciones en 81, luego de que una buena defensa obligara a Franco a pasar el balón, y este, antes de llegar a las manos de Amicucci, quien se encontraba sobre eje de cancha en 6.25, fue interceptado por Profit, quien sin tener resistencia depositó la americana y le puso suspenso a la noche.

En la última ofensiva del tiempo regular, Robinson no pudo convertir sobre la defensa de Profit, y el match necesitó de un tiempo suplementario. Allí una vez más fue el bahiense quien picó en punta a través de Abney, y a pesar de que Moldú se encargó de colocar a los suyos nuevamente cerca, Estudiantes llegó a los 23 segundos finales con diferencia de cinco a favor (91 – 86).

Richotti pidió minuto, y después del mismo su elenco debió reponer desde la media cancha. Esto nunca ocurrió, ya que cuando Martinetto le entregó el balón a Robinson para que sacara, el americano hizo una finta de pase, y en la desesperación por cubrir el balón, su defensor (Pelussi), le quitó la americana de las manos sin que el repositor la haya puesto en juego.

Haciendo cumplir el reglamento, y ante el inmediato reconocimiento de su error por parte del “gringo”, el árbitro le marcó falta técnica al interno sunchalense y con esa sanción se comenzaron a apagar las ilusiones visitantes. Desde la línea Franco no falló los dos lanzamientos (93 a 86), y con el balón nuevamente en juego la escuadra estudiantil hizo correr el reloj para quedarse con la victoria.

Síntesis
Bahía Blanca Estudiantes (81) (93): Pedro Franco 19, Andre Smith 8, Michael Robinson 17, Lawrence Abney 22 y Cristian Amicucci 10 (inicial); Gerardo Barrera 2, Emiliano Agostino 13 y Matías Martínez 2. DT: Marcelo Richotti.

Libertad (81) (86): Sebastián Ginóbili 5, Pablo Moldú 14, Cleotis Brown 0, Andrés Pelussi 32 y Rubén Wolkowyski 10 (inicial); Laron Profit 21, Marcos Saglietti 2, Tyler Field 2, Diego Alba 0 y Andrés Landoni 0. DT: Juan Parola.

Parciales: 25 – 15 / 45 – 31 / 64 – 60 / 81 - 81.
Árbitros: Fernández – Martinetto.
Estadio: Dr. Osvaldo Casanova.
Crónica: Emanuel Niel (eniel@pickandroll.net)