Se entiende que la temperatura dentro de un estadio se incrementa respecto de la del ambiente externo por varias razones (luces, características del techo, escasez de extractores de aire), entre ellas el calor que genera la acumulación de las personas. En ese sentido, el arquitecto del Orfeo, Cristian Augustinoy, explicó: “Se considera que en un recinto cerrado, cada 70 personas se genera un calor equivalente al de una estufa de cuarzo de doble vela encendida. Un pequeño gimnasio con capacidad para 700 personas son diez estufas en funcionamiento”.