Porque el clásico tenía que contar con todos los ingredientes de una fiesta, quien festejó de una manera especial no fueron ni los jugadores, ni el técnico sino uno de los hinchas: se trata de Manuel Ovejero, quien encestó desde mitad de cancha en el concurso “Encestá y ganá”, en la que se hizo acreedor de la moto que entrega la Asociación Atlética Quimsa y la firma comercial Las Malvinas.
El ganador fue el segundo tirador y con un soberbio lanzamiento desde el círculo central se llevó la moto del concurso que premia la fidelidad del hincha de Quimsa