La novedad fue la presencia en la práctica de Eduardo Villares que no pudo viajar a Mar del Plata para participar del Juego de las Estrellas por un esguince en su tobillo izquierdo producido en el último partido en Corrientes. “Fue una jugada en el primer tiempo donde frené y sentí el pinchazo. En la segunda etapa intenté jugar con un estribo pero no pude soportar el dolor”, comentó el perimetral paranaense mientras era asistido con magneto terapia y ultrasonido.
Este martes al mediodía, Villares será revisado por el especialista Fabián Bravo y allí se determinarán los pasos a seguir. Por ahora su presencia en el juego del viernes ante los formoseños es una incógnita.
Por otra parte, al escolta Pablo Moldú se le realizarán estudios en una de sus rodillas porque se le inflama y acumula líquido. De todas maneras esta situación no le impide entrenar a la par de sus compañeros.
