MATAdor

La previa trajo una noticia inesperada: la ausencia de Matías Sandes por un fuerte dolor estomacal que se unía a las bajas de Gabriel Deck y Selem Safar. La falta de tres jugadores claves le proponía a Julio Lamas una rotación de apenas 6 jugadores y los juveniles. Y así fue, rotó con un equipo corto que jugó prácticamente al máximo de sus posibilidades. San Lorenzo realizó una ejecución perfecta.

Quilmes, sin Cavaco, tampoco tuvo tanto para rotar, apenas uno más que su rival, condicionando también su posibilidad de subir la defensa a todo el campo. Por lo tanto se generó un juego donde ambos decidieron esperar al rival y obligarlo a jugar al cinco contra cinco. Y para Quilmes justo es decir que lo que cada club pagó por cada individualidad no los pone en un plano de igualdad, sin embargo, en básquet todo se puede esperar.

La defensa de San Lorenzo, avisada de los modos en que Enzo Ruiz y Vildoza atacan desde el perímetro trabajó contra ellos pero no contó con el buen andar de Tracy Robinson (8 pts y dos triules) e Ivory Clark (2 triples) que lograron abrir con tiros la defensa.

De todos modos la decisión defensiva del equipo de Lamas estaba plantada y prefirió cargar sus tintas sobre el base, el escolta y el pivote, porque Basualdo fue contenido todo el tiempo. En ataque la visita se valió de Jerome Meyinsse que atendió en los dos lados de la cancha, atacando bien en el mano a mano, el rebote ofensivo y consiguió 8 puntos.

Marcos Mata empezó a mostrarse como un hombre importante consiguiendo castigar las rotaciones defensivas de Quilmes. Dos triples de Marcos se sumaron a uno de Scala y otro de Aguirre para que el primer cuarto se lo lleve con justicia la visita por 16-24.

La propuesta de Quilmes fue aprovechar el tiro de tres puntos desde la circulación de balón. Acaso porque el cervecero no cuenta con jugadores que produzcan espacios desde la individualidad. Fue construyendo un sólido juego de rompimiento y descarga que terminó casi siempre en un tiro de tres porque San Lorenzo cerró bien su canasto y las penetraciones, tanto en hombre como en zona.

El cervecero tuvo 4/9 en triples en el segmento con mínimas intervenciones del Pick and Roll para los grandes (2 pts de Basualdo y 4 de Eslava). El gran problema para Quilmes no fue atacarlo a San Lorenzo sino defenderlo. La ejecución del equipo de Boedo orilló la perfección (situación que se extendería casi todo el juego).

Santiago Scala jugando de base o de escolta fue una maquina de meter puntos (16 en la primera mitad y 13 en el segundo cuarto). Castigó todas y cada una de las rotaciones defensivas de Quilmes. Si el local esperó una equivocación para sobrevivir, San Lorenzo no le dio chances.

La primera parte del tercer cuarto fue toda de San Lorenzo quien salió con Díaz encendido y otra vez Meyinsse haciéndose gigante en el poste bajo llevaron la diferencia máxima hasta los 17 puntos (44-61) justo cuando quedaban 5 minutos para que finalice el segmento.

El parcial 8-14 para la visita era propio de un juego que dominaba el campeón de Liga y tenía rumbo a juego definitivo, pero Quilmes no se rindió y Bianchelli decidió que Robinson vaya de ala pivote con Clark de falso pivote conteniendo a Meyinsse en el mano a mano. Bajó la altura del perímetro con Vildoza, Flor y Ruiz y la ecuación le funcionó.

El cervecero tuvo gol con Vildoza y Ruíz juntos (por única vez en el juego y se notó) mientras que Flor también se unió al show ofensivo para que Quilmes recupere terreno y se ponga solo a 9 al final del cuarto (61-70) con parcial 17-9 en los últimos 5 minutos del tercer cuarto.

El partido ganó en emotividad en el segmento final. Entre Ivory Clark (desde afuera) y Eric Flor (con los rompimientos) empezaron hundir la defensa rival para achicar el partido a 5 (68-73) a falta de largos 7:22.

Desde allí empezó a hacerse cargo de todo (o casi todo) Marcos Mata, de cuyas manos salieron las soluciones más esperadas en el momento clave. Un triple largo y un doble fenomenal atacando el aro estiraron a otra vez a 10 (73-83) para que San Lorenzo se tranquilice y en virtud de sus buenas jerarquías individuales pueda administrar la diferencia ante los embates de Quilmes que solo iba con el corazón y en plan alternativo todo el tiempo.

Además San Lorenzo tuvo gol en todas la manos. Cuando Quilmes fue dos por uno a algún costado de la cancha, pasaron el balón y castigaron la rotación con conversiones de todos en cada momentos para terminar con porcentajes de ensueño (terminó con 15/26 en triples 57% y 22/36 en doble, 61%)

Quilmes pudo ofrecer 83 puntos en ataque sin disfrutar de una buena noche de la tripleta Vildoza-Ruiz-Basualdo. Lo cual puede ser una buena noticia pero no pudo defender nunca la calidad de ejecución de los jugadores de San Lorenzo, que tuvieron a Mata (6/7 en triples) y Scala (5/7 en triples) en llamas para sacar a delante un juego dificil y raro por las ausencias. El puntero sigue más puntero que nunca en busca del Super 4 que quedó a una sola victoria de distancia.

Síntesis:

Quilmes (83): Luca Vildoza 7, Enzo Ruiz 9, Tracy Robinson 16, Ivory Clark 15 e Iván Basualdo 5 (FI); Ariel Eslava 4, Eric Flor 19, Bruno Sansimoni 8. DT: Javier Bianchelli.

San Lorenzo (96): Nicolás Aguirre 11, Guillermo Díaz 12, Marcos Mata 22, Mathias Calfani 12 y Jerome Meyinsse 20 (FI); Santiago Scala 19, Lisandro Fernández (-). DT: Julio Lamas.

Parciales: 16-24, 36-47; 61-70 y 83-96.
Árbitros: Alejandro Chiti y Oscar Brítez.
Estadio: Polideportivo Islas Malvinas (Mar del Plata).

Crónica: Pablo Tosal - @pablotosal
Fotos: LNB contenidos

Multimedia: LNB Contenidos

Edición Videos: Juan M. Di Marco (@JuaneMeDiMarco) para Pick&Roll