El equipo marplatense se anota como presente en el Super 8 de Mendoza. Sacó pasajes con la victoria ante Boca Juniors 91-81 en un buen partido, donde el local manejó por largos pasajes el desarrollo. Boca se durmió 10 minutos y lo pagó caro.
Peñarol sorprendió a Boca en el arranque abriendo una distancia inicial importante (10-2) repartiendo el goleo en diferentes manos. Fueron 3 minutos de excelencia. Carlos Duro frenó el juego con un minuto y su equipo reaccionó. En apenas dos minutos logró empatar el partido en 10 con una defensa mucho más sólida y la explosión que le dio Cequeira a la ofensiva.
El técnico de Peñarol sacó a Campazzo para dosificar sus energías y para tratar de encontrar en Ibarra una marca con menos desgaste para Cequeira. No obstante el base de Boca se fue adueñando de los ritmos (3 recuperos y 9 puntos) liderando a su equipo en la ofensiva.
Peñarol respondió muy bien con la imagen más desconocida de todas sus versiones, sin Leiva, Leo Gutiérrez y Campazzo en cancha, el equipo se pasó el balón y anotaron 8 jugadores en todo el primer segmento. Así llegaron al final del primer cuarto a puro gol 27-24.
El primer doble del segundo cuarto fue de Axel Weigand y lo menciono destacado porque en 11 minutos Peñarol tenía la rarísima versión de haber encontrado gol en 9 manos distintas, es decir ¡en toda la rotación!. Ofensivamente no era esclavo de ninguna figura y todos se prendían en el goleo.
La apuesta de Boca para mejorar fue el ingreso de Lucas Faggiano para contener al base rival mientras Cequeira tomaba la base solo en ataque. Selem Safar completó un mal primer tiempo y el dueto Cequeira-Faggiano brindó más soluciones. El problema lo tenía en el juego interior con las tres faltas de Delia y un extranjero nuevo (Lamont Barnes) que también se cargó con dos faltas y algunas torpezas propias de un jugador recién llegado.
Llegaron justo a la mitad del segundo cuarto (5:00) empatados en 34 pero llegó el momento de Leo Gutiérrez en el juego y se cargó la ofensiva él solo. Abusando del uno contra uno, que perjudica al juego de equipo pero que suele resolver con acierto. Primero sacó un doble y falta, en la siguiente acción una falta y convirtió los dos libres y finalmente un triple. Fue una secuencia de 8 puntos a pura individualidad que coronó con una asistencia a Weigand para que su compañero la vuelque. El cierre del primer tiempo lo encontró arriba al local 46-40.
En el tercer cuarto Boca jugó su mejor pasaje en el inicio con un fulgurante parcial de 0-11 en 4:30 que le dio el liderazgo 47-51 (Peñarol 0/8 de campo). De Groat calentaba motores, Cequeira hacía jugar y Safar convirtió su primer triple. Fue entonces que Fernando Rivero acertó al repetir la fórmula del clásico con Boccia de escolta y Weigand de alero.
Peñarol ajustó la defensa sobre todo la de DeGroat y recuperando balones empezó a correr el contraataque. Apareció en acción Boccia (7 pts) y lo acompañó Leiva con 4 pts. El milrayitas retomó el liderazgo y cerró 6 arriba el tercer cuarto (63-57).
El buen momento de Peñarol no se detuvo allí y comenzó el último cuarto con parcial 10-0 para extender el marcador a 73-57. Desde que Fernando Rivero pidió minuto en el tercer cuarto (perdiendo 47-51) en 8 minutos su equipo aplicó un parcial 26-6 entre el cierre del tercer cuarto y el comienzo del último. Decisivo para ganar el partido.
Y una noticia por demás adelantadora para Peñarol es que pudo hacer todo eso con Campazzo, Leo Gutiérrez y Leiva sentados en el banco. Ibarra, Johnson, Boccia, Weigand y Gabriel Fernández bancaron la parada. Por el contrario Boca aflojó el juego de conjunto y el aporte ofensivo se limitaron a acciones de uno contra uno, desdibujando el buen pasaje que había tenido en gran parte de la primera mitad y tercer cuarto.
Para definir el partido el entrenador local mando a la cancha a su power trio y cerró bien el partido. Boca encontró en Delía una de las pocas opciones que tuvo para sumar (aunque el partido estaba definido). El juvenil pivote xeneize marcó 9 puntos en un ratito y la brecha se estacionó en los 10 puntos que fue justo la diferencia que Peñarol necesitaba (había perdido por 9 en la Bombonerita) alcanzando el triunfo en un buen juego que además le otorga el boleto al Super 8 de Mendoza.
Síntesis Peñarol (91): Facundo Campazzo 7, Kejuan Johnson 8, Adrián Boccia 15, Leo Gutierrez 20, Martín Leiva 13 (FI) Matías Ibarra 8, Gabriel Fernández 9, Axel Weigand 9 e Isaac Sosa 2. DT Fernando Rivero
Boca (81): Luis Cequeira 17, Selem Safar 9, Federico Aguerre 4, John DeGroat 19, Marcos Delia 19 (FI) Lamont Barnes 2, Patricio Prato 7, Lucas Faggiano 2 y Alejandro Diez 2. DT Carlos Duro
Foto: Majo Gil (@MajoPick / mjgil@pickandroll.net) Crónica: Pablo Tosal (@pablotosal)
»Bruno Milraya24/11/2013 00:00
Leo ya estas en el final de tu carrera, se nota, estas rindiendo muy flojo viejo.. jaaaaaaaaaaaaa
Grande Peña querido! hay q felicitar a este equipo q a pesar de todo lo q se dijo y q las cosas q no venian saliendo bien, cumplió el objetivo q se habian propuesto q era entrar en el super 8 por cuenta propia, con mucho esfuerzo.
