Boccia con Boca se desboca

En un partido lleno de condimentos Boca venció a Quilmes por 89 a 87 en tiempo suplementario. El verdugo fue Adrián Boccia que faltando una décima anotó con su peculiar flotadora y le dio a Boca la primera victoria del torneo. Por su parte, Quilmes sin cuatro jugadores por lesión ( Vildoza, Maciel, Merchant y Spalla) ocultó sus debilidades y le dio lucha a un equipo que, salvo por su nuevo extranjero, llegó completo al Once Unidos.

El comienzo del partido tuvo a un Boca un poco más fino que Quilmes y con Boccia como estandarte se puso arriba 9 a 4. Con el pasar de los minutos el local fue ajustando en el costado defensivo y esto le permitió emparejar el tanteador con un parcial de 5/0. Los últimos cinco minutos los dos se repartieron el liderazgo del tanteador y con un juego más individual que en equipo terminaron empatados en 16. En Quilmes ocho puntos para Baxley y seis para Diego Romero aprovechando muy bien el poste bajo. En Boca seis para Boccia y cinco para Fabián Ramirez Barrios que perdió muy rápido a Freeman que se tuvo que sentar por sumar dos faltas.

El inicio del segundo cuarto después de dos libres de Durley, Boca volvió a ser el que golpeó con un parcial de 7/0, producto de una conversión de Kevin Hernández, un triple de Ferreyra y un doble de Adrián Boccia para separarse 23 a 18, situación que obligó a Leandro Ramella frenar las acciones con un minuto pedido.

En el regreso poco a poco la defensa de los Quilmeños comenzó a encontrar regularidad y esto le dio en la faz ofensiva mejor toma de decisiones en posesiones largas y bien jugadas. La figura de Diego Romero (9) se acrecentó en la pintura, al igual que la de Walter Baxley (15) en los lanzamientos en media y larga distancia, mientras Luis Cequeira manejó los hilos de cada ataque para terminar dando vuelta la historia y cerrar el primer tiempo arriba por 35 a 30. En lo que fue un parcial de 20 – 14 con un plantel corto que tuvo a Calvi y Durley jugando los 20 minutos, sin descansar un segundo. Boca por su parte solamente pudo aguantar y el plan de juego se fue desgastando, donde su importante pivote extranjero Freeman no pudo nunca entrar en juego sumando rápido tres faltas, mientras veía como Quilmes se venía encima y dominaba el ritmo del partido.

En el arranque del tercero, el DT visitante decidió salir con Lucas Gargallo de escolta buscando un poco más de velocidad a la hora de atacar para encontrar mal parado al balance defensivo de Quilmes. Pero no solamente fue una decisión ofensiva, sino que Boca se recostó por una defensa cajón y uno donde Lucas Gargallo fue el encargado de seguir a Baxley y esto le dio sus réditos a los de Capelli que despacio se fueron acercando y con un costa a costa de Fabián Ramírez Barrios se colocaron al frente por un punto 44 – 45.

Los últimos tres minutos del cuarto fueron pura emoción, triple de un lado, triple del otro, bandeja de un lado y bandeja del otro no dieron respiro a la mesa de control que no paraba de sumar puntos. Mucho tenía que ver la baja efectividad defensiva de ambos. En esa situación del golpe por golpe Quilmes anotó 19, contra 26 de Boca para que los de Capelli pasen al frente (54 – 56) de cara al último cuarto.

Emociones fuertes tenía reservado el partido para el segmento final. Rápidamente Boca se despegó en el resultado 54 -61, pero Quilmes respondió de la mano de un Jonathan Durley encendido para emparejar el marcador 60 - 61. El juego en esos primeros cinco minutos se hizo de ida y vuelta, donde era Boca de la mano de Boccia (2/2 en triples en ese momento) era el que mantenía la ventaja y jugaba con los nervios de un equipo local que estaba pasado de revoluciones para tomar buenas decisiones.

Con dos minutos por jugarse, el misionero Diego Romero en la pintura anotó dos puntos y además le sacó una falta a Freeman para hacer explotar al Once Unidos e igualar en 71. Los últimos minutos no fue apto para cardíacos ya que con una posesión por jugarse, Boca se encontraba al frente 77 a 75. La última parecía ser para Quilmes que intentó con Baxley y fue tapado y con ocho segundos, nuevamente fue el extranjero el encargado de igualar el cotejo en 77. Boca tuvo finalmente la oportunidad de ganarlo con dos segundos, pero el lanzamiento no tocó aro y como el jueves pasado los de Capelli tuvieron que disputar tiempo extra. Aunque parezca difícil Quilmes había logrado controlar a Freeman que se fue por cinco faltas teniendo apenas un paso testimonial por el partido.

En este segmento, la tensión y los nervios jugaron un rol importante. El suplementario fue pura emoción y poca estrategia, ya que ninguno de los dos logró despegarse del otro a poco del final. En Boca seguía siendo vital en la parte ofensiva Adrián Boccia que con otro triple llegaba a 25 puntos, mientras que en Quilmes importante la aparición en el momento que más lo necesitaba de Luis Cequeira. Tan parejo estaba todo que faltando 60 segundos el score estaba igualado en 84.

Con 38 segundos en el reloj, un tiro en suspensión de Kevin Hernández daba a Boca una luz de tres arriba (84 -87). Luego del minuto de Ramella, Fernando Calvi anotó un tiro de tres puntos para volver a poner en tablas el match. El desenlace y la última bola fue para Boca que esta vez con una flotadora de Boccia encontró la victoria a falta de una décima en el reloj 87 – 89. El ex Peñarol fue el máximo anotador de su equipo con 29 puntos, con 9 -19 en dobles y 3 - 4 en triples.

En Quilmes 24 puntos fueron los de Baxley y 23 los de Durley. Queda bien claro que la situación del cervecero no puede ser peor, esta noche el banco de suplentes estaba minado de jugadores juveniles y solamente fue Bruno Sansimoni el que le dio 3 puntos de rotación a Ramella.

Síntesis
Quilmes (Mar del Plata) 87: Luis Cequeira 11, Walter Baxley 24, Fernando Calvi 7, Jonathan Durley 23 y Diego Romero 19 (FI) Tayavek Gallizi 0, Bruno Sansimoni 3, Tomás Reimundo 0, Santiago Coria 0, Agustín Lecona 0, Ariel Lencina 0 y Elías Iñiguez 0.Entrenador: Leandro Ramella.

Boca Juniors 89: Jonatan Treise 15, Adrian Boccia 29, Fabián Ramirez Barrios 18, Axel Weigand 2 y Rashaum Freeman 5(FI); Lucas Gargallo 4, Kevin Hernández 6, Alejo Rodríguez 0, Crhistian Boudet 0 y Nicolás Ferreyra 10. Entrenador: Adrián Capelli.

Parciales: 16 -16, 19 -14, 19 – 26, 23 – 21, 10 – 12.
Arbitros: Alejandro Chiti – Oscar Britez.
Estadio: "Once Unidos".

Flavio Ariel Ibarra
En Twitter @Flaviorocambole