Lo mató a triples

Los buenos porcentajes de anoche justifican la victoria de Gimnasia sobre Ferro. Casi el 60% en tiros de campo contra un débil 42 de su rival. El lobo necesitaba la victoria para lavar su imagen de dos derrotas consecutivas y a la vez una mejoría en su forma de juego. Los verdes de Caballito ratificar su buen momento que les permitió sumar su primer éxito la fecha pasada.

Los dirigidos por Gonzalo García volvieron al triunfo y finalizaron la primera fase con el Polideportivo invicto, algo que se va convirtiendo en una visita no muy bien vista por su rival ya que los platenses no caen en su casa desde el 23 de noviembre de 2001.

En el rendimiento de equipo volvió a fallar porque esta vez al no conseguir buenas ofensivas con cómodos lanzamientos, abusó del tiro de tres puntos. Anoche le salió bien la jugada porque obtuvo buenos porcentajes (10/21), pero ojo... no todas las noches son las mismas.

El comienzo del partido mostró a un Benítez afilado con el aro. El pivot se despachó con nueve puntos para ser la principal vía de gol de Gimnasia. Rodríguez estuvo errático y su equipo sintió la falta de gol del último goleador de la Liga. Ferro mediante Centeno, muy activo en la toma de rebotes, se mantuvo en juego y cerró abajo 23-19.

La sorpresa invadió el Polideportivo cuando los verdes pasaron a ganar 27-29. El joven Gabriel Domínguez fue clave en la remontada de su equipo. A él se acopló bien el rendidor Senitzky, que anoche no mostró todo su repertorio, y Salles dificultó la labor mens sana desde la base.

Gimnasia se quedó sin sus principales armas por méritos del rival pero los desacoples también fueron una de las causas del desconcierto local. García no le encontró la mano al partido y probó con Fernández, depués con Lauro, y hasta llegó a usar a los dos en la base. A diferencia de los dichos de Héctor Veira en fútbol, en el lobo “la base no está”.

Pese a esto, Gimnasia tuvo suerte y en una noche fría y lluviosa calentó el ambiente con los bombazos de 6.25 metros (6/12 al final del primer tiempo) y se salvó del huracán. Los 20 minutos finalizaron con el marcador favorable al local por 47-40.

En el tercer período se cometieron muchos errores en el traslado de balón y opacó el espectáculo. Roberto López apareció por Gimnasia con un gran cuarto (9 puntos), mientras que Fernández le encontró la vuelta a la base. Hernando Salles con su unipersonal de 7 puntos mantuvo a Ferro ,pero con el correr de los minutos su poderío decayó y con él los de Caballito se fueron rezagando.

Un parcial de 10-0 al comienzo del último cuarto marcó el final del juego. El tablero marcó 74-55 y los dirigidos por Pablo Dastugue se quedaron sin fuerzas. Fernando Rodríguez se hizo amigo del aro y sumó diez puntos más a su cuenta para llegar a 17. Lauro manejó al equipo y aunque la liga pase por tiempos de vacas flacas los doce jugadores mens sana participaron del encuentro y sumaron puntos.

Los juveniles tuvieron sus minutos en campo, para el festejo de la bandera “Aguanten los pibes”, y deleitaron a todos los presentes que se fueron con una sonrisa en el día de la madre.

Síntesis:

Gimnasia y Esgrima La Plata (98): Leandro Lauro 5, Fernando Rodríguez 17, Gustavo Oroná 6, Roberto López 16, Jorge Benítez 14 (fi), Gabriel Moravansky 2, Oscar Arce 14, Gustavo Roque Fernández 13, Ramiro García 4, Santiago Ramati 2, Juan Manuel Rivero 3, Bruno Oprandi 2. DT: Gonzalo García.

Ferro (71): Hernando Salles 20, Federico Senitzky 14, Mauro Rostchy 9, Gustavo Bianchi 6, Ricardo Centeno 7 (x) (fi), Marcelo Ottolini 4, Gabriel Domínguez 11, Víctor Sudol 0. DT: Pablo Dastugue.

Jueces: Roberto Settembrini y Marcelo Latorre.

Parciales: 23-19, 47-40 y 65-55.

Estadio: Polideportivo de Gimnasia y Esgrima.

Figura: Roberto López

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