Regatas, con el tiro final

La fiesta del final, con la gente abrazándose, saltando y bailando en el rectángulo de juego y en las tribunas, por el agónico triunfo de Regatas, dejó atrás el magro juego que exhibieron anoche el equipo “fantasma” y Conarpesa. No era para menos, empezó ganando la segunda fase de la Liga Nacional 2004/05 de basquetbol y nada menos que ante un rival sindicado como uno de los mejores del torneo. El tablero marcó un ajustado 71 a 70 mediante un triple de Eduardo Villares casi sobre el mismo epílogo de un juego con final emocionante.

El inicio de Regatas fue promisorio, utilizando eficazmente los ataques rápidos que le permitieron desarticular la defensa, un tanto lenta para reagruparse, de Conarpesa. Los internos “fantasmas” se turnaron en la marca de Perryman y lo aislaron de la pintura, entonces los patagónicos dependieron de los tiros externos y algunas penetraciones de Alexander, la vía más clara para llegar al gol del encumbrado equipo dirigido por el “Huevo” Oscar Sánchez.

Sin embargo, la defensa zonal que implementó Regatas (varió entre un dispositivo 2-3 y otro 2-1-2) durante gran parte del primer tiempo no le trajo buenos dividendos, porque Conarpesa tuvo alto porcentaje en triples (sobresalieron Prego, con 4 aciertos, y Acosta, con 3). Aunque la brecha jamás se abrió (se fueron al descanso largo 39-42), lo que marca la paridad de este duelo que se convirtió en una especie de clásico, no por cercanía -de hecho, Puerto Madryn está aproximadamente a 3000 Kilómetros de Corrientes- sino luego de la serie por el ascenso de la temporada pasada, que también quedó en manos de Regatas. Por eso la hinchada no se cansó de ‘recordarles’ a los visitantes, “que nacieron hijos nuestros, hijos nuestros morirán...”.

Pero Regatas salió a disputar el 3er cuarto sin tanta convicción para atacar y, sumado a ello, perdió peso en los rebotes de enfrente. Lo salvó que Conarpesa tampoco estuvo muy inspirado en ese lapso y, por consecuencia, el parcial fue el más bajo de la noche: 15-10 (49-57), para los “langostinos”.

La obligación de mejorar llegó para el último cuarto. Fue clave la decisión de Santander de practicar defensa individual. Así, con ayudas constantes y relevos acertados, le quitó a Conarpesa confianza en los tiros desde la línea de 6.25 metros (en todo el segundo tiempo convirtió sólo dos triples) y monopolizó los rebotes debajo de su aro. Entonces las puertas del éxito empezaron a abrirse y la luz del triunfo alumbraba con más fuerza.

Dos ‘bombas’ de Salles, nuevamente decisivo, desde tercera dimensión y, posteriormente un par de libres, dejaron 5 puntos arriba a Regatas (68-63) restando apenas 2:30 minutos. Esto puso al límite el latido del corazón en cada uno de los protagonistas -y del público en general-. Con un triple de Treise y dos simples de Alexander (69-68), Conarpesa recuperó la confianza y, para más, Regatas no logró cerrar tres ofensivas consecutivas; entre ellas, una mandada de Robinson que rebotó en la parte inferior del aro, tras tomar el rebote, Reinick recibió la falta instantánea del mismo americano regatense.

El nerviosismo atrapó a todos los presentes -desde el presidente de la institución “remera” hasta el hincha más fanático- en el colmado “Estadio de los Sueños”. Pero el pivote de Conarpesa, ése que tanto había fallado desde la línea de sentencia (2/7), sólo aprovechó un lanzamiento (70-68, faltando 7”). Entonces recobró el balón Robinson, alargó para Salles, éste asistió a Villares, que en una fracción de segundo amagó y probó de tres puntos, era matar o morir y... ¡Imagínese!, todos soltaron el alarido triunfal. El ex goleador del equipo de Puerto Madryn esta vez fue su verdugo y la alegría no tuvo límites, festejando con locura todo el Parque.

Síntesis
Regatas Corrientes (71): Hernando Salles 16, Eduardo Villares 19, Mike Robinson 14, Ricardo Centeno 4, Earl Ike 6 (FI); Alejandro Olivares 2, Martín Melo (x) 10 y David Maldonado 0. DT: Silvio Santander.

Conarpesa (70)Diego Alba 5, Sebastián Acosta 13, Diego Prego 15, Ryan Perryman (x) 5, Quincy Alexander 17 (FI); Jonatan Treise 5, Roberto Maciel 0 y Alejandro Reinick 10. DT: Oscar Sánchez.

Parciales: 23-21, 39-42 (16-21) / 49-57 (10-15) y 71-70 (21-13).
Árbitros: Roberto Settembrini y Diego Rougier
Estadio: Club de Regatas Corrientes.

Carlos Zeniquel (h) - de la Redacción de “Época”