Se vienen en Patota

Que me voy, que me quedo. Que lo echamos, que lo contratamos. Que está todo mal, que está todo bien. Así de ciclotímica fue la semana previa que vivió Belgrano de San Nicolás respecto de la situación de su técnico Pablo Dastugue.

La dirigencia del club lo despidió el lunes por la noche e increíblemente lo volvió a contratar el martes por la mañana. Y Patota aceptó: “Me quedó porque me gusta poner la cara en los momentos bravos, pero la verdad me sentí manoseado por los dirigentes. La relación ya no es la misma, estoy porque es Belgrano, nada más”, dijo antes del comienzo del partido en Mar del Plata.

Por eso ni el más fanático de los hinchas de Belgrano hubiera imaginado un lunes con tanta gloria. El equipo ganó dos partidos en calidad de visitante, uno muy importante ante Gimnasia de La Plata, y le sacó algunos puntos de ventaja a sus inmediatos perseguidores en la lucha por el descenso.

En definitiva fue 85 a 79 sobre Quilmes, en la misma cancha -Once Unidos- donde en la temporada 97/98 se salvó del descenso. Para ello contó con el aporte de sus extranjeros y la buena defensa que realizó en los últimos treinta minutos.

Comenzó algo mejor Belgrano gracias a la efectividad de los primeros ataques. Con un 4/4 en tiros de campo pasó a estar 9-5. A partir de ahí se vio lo mejor de Quilmes en el partido. Con la aparición de Pablo Gil puso un parcial de 6 a 0 para pasar al frente.

Belgrano empezó a errar más seguido, aunque un par de triples de Andrés Del Sol y el aporte cerca de los tableros de Stanley Easterling lo mantenían en juego. Claro que Quilmes respondía con más alternativas. A esa altura ya era muy bueno lo Evric Gray e incluso Claudio Chiappero encontraba algunos huecos para convertir.

Con un cierre favorable Quilmes se fue al primer descanso ganando 34 a 27. Mucho goleo y poca defensa fueron las claves de esos diez minutos iniciales.

En el segundo cuarto todo empezaría a cambiar. Belgrano salió decidido a ponerse el overol y marcar más agresivo. Algo que ocurrió hasta el final del juego (Quilmes marcó 15 puntos por cuarto en los últimos tres).

Arrancó con una zona no muy eficaz que le permitió a Quilmes sacar 11 puntos de luz en un abrir y cerrar de ojos. 43 a 32 a favor de los de Bianchelli que a esa altura presentaba en cancha a Todd Williams como base alternativo -Luis Cequeira está lesionado- para darle descanso a Gustavo Fernández.

Quilmes no aprovechó esa ventaja -durante todo el cuarto estuvo en el banco Gray después de unos primeros diez minutos interesantes- y Belgrano se fue acercando con el aporte de los suplentes.

Entre Carlos Colla, Nicolás Ferreyra y Pablo Rizzo sumaron 14 de los 20 tantos de ese tramo. Y con un parcial de 15 a 6 en los últimos cinco minutos se pusieron a 2...49 a 47. Así terminó el primer tiempo.

El reinicio del juego fue parejo -el tercer cuarto terminaría empatado en 15-, aunque de flojo nivel. En ese terreno se vio favorecido el equipo nicoleño. Quilmes dependía en ataque de Gil y Gray. Una ráfaga de ellos dos los puso otra vez con una ventaja interesante: 57 a 49.

Pero otra vez la desperdició. Con la entrega de todos y los puntos de los morochos Crutchfield y Fleming el partido se emparejó nuevamente: 59 iguales con 3´30“ por jugar.

Hasta el final del cuarto todo siguió muy luchado y Belgrano, a pesar de irse abajo (64 a 62) ya tenía una certeza: había encontrado el camino para defender a Gil, a la postre la clave del partido.

Quilmes entró a los últimos diez muy errático y con pocas ideas en el ataque estacionado. Gil no encontraba el aro por mérito de Colla, Fioretti y compañía (marcó 2 puntos en ese parcial) y Gray evidentemente no es el extranjero dominante de la temporada pasada.

Andrés Del Sol entró inspirado y le dio un par de dobles que pusieron al frente a la visita por 68 a 66. Quilmes estaba perdido y sin gol -7 puntos en casi 7 minutos-. Con Gil y Gray bien marcados nadie tomó la posta.

Fleming, Colla -gran último cuarto- y Crutchfield -aunque no tanto en el goleo- se encargaron de ir manteniendo esa ventaja. A falta de 1´50” ganaba el equipo de Dastugue por 79 a 76.

En ese momento hubo una pérdida increíble de Williams que le quiso dar la pelota a Gray cuando este no estaba mirando y Colla definió el juego desde la línea para decorar el 85 a 79 final.

Para Belgrano la satisfacción de conseguir dos victorias de visitante después de una semana muy movida...no está nada mal. Para Quilmes el manto de duda tras una nueva derrota que lo complica en su lucha por estar dentro de los primeros ocho...no está nada bien.

Síntesis
Quilmes (79): Gustavo I. Fernández 9, Pablo Gil 27 (x), Todd Williams 7, Evric Gray 19, Claudio Chiappero 9 (FI); Esteban De la Fuente 3, Juan Pablo Sánchez 2, Selem Safar 1 y Mariano Gagey 2. DT: Javier Bianchelli - Alejandro Mangone.
Belgrano 85: Andrés Del Sol 14, Matías Fioretti 4, Tai Crutchfield 15, Marcus Fleming 19, Syan Easterling 8 (x) (FI); Carlos Colla 16, Nicolás Ferreyra 5, Pablo Rizzo 4, Omar Cantón 0. DT: Pablo Dastugue.

Parciales: 34-27, 49-47 y 64-62.
Estadio: Once Unidos de Mar del Plata.
Arbitros: Ramallo-Smith.

Leonardo Rodríguez
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