Oscar Sánchez, el entrenador de Deportivo Madryn, se enojó muchísimo con los jueces Pablo Estevez y Jorge Chávez. En un error garrafal, a un minuto del final, los árbitros dieron para Ciclista una pelota que claramente era para la visita. Esto hizo enloquecer a Sánchez, que comenzó a increparlos, insultándolos en la cara y haciéndoles señas de “me robaron el partido”. Sin embargo, tal vez concientes de aquella equivocación, los jueces no le cobraron técnico al “Huevo”. En general, no fue un buen arbitraje de la dupla de jueces.