“Empezar una nueva temporada con una derrota como la de hoy (por ayer) es muy duro”, fue la síntesis que dejó el pivote Diego Osella a los micrófonos que se le acercaron al túnel que conduce a los vestuarios.
“Hicimos las cosas bastante mal, perdimos la brújula en la ofensiva y después, al no salirnos las cosas, caímos en la desesperación al ver que no le encontrábamos la vuelta a Belgrano”, explicó.
Antes de irse a las vestuarios, “el Pepe” advirtió que deberán redoblar esfuerzos porque “hay que mejorar, empezar a darle alegrías a la gente que viene a vernos. Será duro, habrá que acoplar a los extranjeros, pero no nos queda otra”, finalizó.
Otro de los solicitados fue el goleador de la noche y ex Atenas, Fernando Funes. Muy contento y tranquilo, el alero sólo atinó a decir que no se trató de una revancha. “Mi trabajo de hoy sólo se limitó a lo que el técnico pidió”, dijo.