Suspención

El clásico del básquetbol femenino cordobés entre Rieles Argentinos y Deportivo Central Córdoba, que debía jugarse en el marco de la cuarta fecha de la Liga Nacional, ayer a las 20 en la cancha del equipo de Alta Córdoba, fue suspendido por ausencia de un agente de policía para completar el número requerido.

Ahora, la disputa quedará sujeta a la decisión del tribunal de la Federación Femenina de Básquetbol de la República Argentina (Febra), a partir del informe que eleven los árbitros, quienes explicaron lo acontecido. “Tiene que haber tres uniformados al comienzo del partido y en el caso de que no estén se les dará 15 minutos de tolerancia”, dijo Andrea Sandin, una de las árbitros del juego.

Pero cumplido el tiempo de espera, y en contra de la voluntad de su equipo, el entrenador de Deportivo Central Córdoba, Alejandro Busciglio, hizo cumplir el reglamento al pie de la letra y tiene sus razones. “Nosotros hicimos un gasto importante para traer a una jugadora de la Asociación de Rosario, presentamos todo en tiempo y forma pero el árbitro nos dijo que aún no estaba habilitada. Entonces si a nosotros nos hacen cumplir con el reglamento, pues haremos que los otros también lo cumplan”, sentenció el DT.

“El club Rieles Argentinos tiene los medios necesarios para cumplir con lo que se establece, porque el Gobierno de Córdoba pone plata, y a nosotros, que hace 10 años que jugamos en la Liga, nunca nos dieron ni 400 pesos para pagarle a un árbitro. Con esta reacción vamos a lograr que nos respeten y demostrarles que no comemos vidrio”, completó el entrenador, que dejó a juicio de sus jugadoras su continuidad en el cargo.

Por su parte, Carolina Arias, representante de Rieles, dijo que el técnico Busciglio, hizo “el show” al que está habituado.

La Voz del Interior - Eugenia Mastri