Con un triunfo se viaja mejor

Estudiantes venció a Obras por 73 a 60, en lo que fue el último encuentro antes del receso y a su vez, la despedida de Calvester Ferguson, quien fue cortado por la dirigencia alba. En las primeras horas de la madrugada el plantel viajó hacia Buenos Aires, donde hoy emprenderá vuelo hacia Holanda, lugar en le que se disputará el torneo de fin de año.

La clave para que el equipo que representa a Bahía Blanca se quede con los dos puntos, ante un rival directo, estuvo en el comienzo y en el cierre del partido. En el primer cuarto, Obras solo anotó 14 unidades con mucho protagonismo de Byron Wilson, debido a que Tyler Field se encontró solo debajo del canasto, y Silas Mills tuvo una noche donde borró lo bueno que había realizado en los juegos anteriores.

Mucho más ordenado que su rival, el dueño de casa no solo estuvo efectivo en sus lanzamientos de campo, sino que además logró, a través de sus defensas con atrapes, desorientar al tachero, que no pudo desarrollar una idea clara a la hora de atacar.

En el segundo acto el arranque volvió a ser bueno para el anfitrión. Javier Scheines tuvo una de sus mejores noches desde que juega en Liga “A”, y contribuyó para que el anfitrión se disparara 9 – 0, estirando la ventaja a 20 (34-14).

A Pablo Dastugue no le quedó más remedio que mover el banco, y con el ingreso de Federico Pollio y Patricio Rodríguez la situación mejoró. Es que estos dos, en especial Pollio, le dieron mayor decisión en ataque y otra vía de gol, descentralizando toda la carga anotadora que llevaba sobre su espalda Wilson. A su vez, con Mills sentado en el banco, la actuación de Fernando Calvi no fue mala, pesando mucho más en la pintura que el foráneo.

Sin ser demasiado claro, pero obteniendo faltas personales, Obras comenzó a limar la diferencia desde la línea de tiros libres, y sobre el cierre de la primera mitad se puso a nueve, 44 a 35. Estudiantes no tuvo ni paciencia, ni la misma eficacia que en los primeros diez minutos, y fue por ello que perdió la gran diferencia que había sacado en el arranque.

La vuelta de vestuarios trajo mejor al capitalino. Vía Byron Wilson colocó un 6 – 0 de movida, que puso al conjunto de avenida Libertador a solo tres, 44 – 41. Obras había logrado su objetivo: volverse a poner en partido. De todas formas el albo respondió, y en una de las pocas apariciones que tuvo Stalin Ortiz en toda la noche, el bahiense logró alejarse otra vez (52-44).

En el cuarto más desdibujado de todo el encuentro, el tachero pudo hacer pesar su juego interior con la dupla Field-Calvi, y además de blindar su cilindro en el rubro rebotes, entre ambos sumaron ocho puntos, para dejar a su equipo a solo dos, 59 a 57, en el cierre del tercer acto.

Ya instalados en el periodo del epílogo, ambos salieron con una misma disposición táctica en ofensiva: realizar posesiones largas. Y si a una ofensiva que juegue con los 24 segundos, se le suma buenas defensas en ambos costados de la cancha, el resultado puede ser previsible. En este caso, al haber perdido efectividad ambos conjuntos, los errores, las pérdidas por violación de tiempo y los problemas para poner el balón cerca del canasto hicieron que el partido entre en un pozo.

Mientras que Obras buscaba anotar desde afuera, Estudiantes fue más práctico y buscó las faltas que lo depositaron en la línea de tiros libres. De esa forma, y sin jugar un básquet demasiado superior al presentado por el conjunto porteño, se comenzó a alejar, y para cuando el partido entró en la recta final ya estaba todo definido. En ese último chico el elenco que orienta Pablo Dastugue solo convirtió tres puntos, todos a través de Byron Wilson, dando muestras claras que la ofensiva tachera no tuvo su mejor noche.

Síntesis:
Estudiantes (73): Fernando Titarelli 15, Stalin Ortiz 16, Mariano Franco 8, Jamaal Levy 12 y Gerardo Barrera 2 (inicial); Mariano Pizzo 2, Hernán Etchepare 0, Javier Scheines 14 y Calvester Ferguson 4. DT: Guillermo López.

Obras (60): Ezequiel Lamas 0, Daniel Chaher 9, Byron Wilson 18, Silas Mills 6 y Tyler Field 10 (inicial); Julián Olmedo 3, Fernando Calvi 4, Federico Pollio 8 y Patricio Rodríguez 2. DT: Pablo Dastugue.

Parciales: 25 – 14 / 44 – 35 / 59 – 57.
Árbitros: Chiti – Fernández.
Estadio: Dr. Osvaldo Casanova.

Foto: Gentileza Diario La Nueva Provincia

Autor: Emanuel Niel
www.pickandroll.com.ar

Regatas despidió bien el año

El equipo del parque Mitre, que contó con un Diego García brillante (30 puntos; 5/6 triples y 6/9 dobles), entró flojo, pero cuando apretó el acelerador demostró que de local está muy fuerte (10-1). Anoche batió a Quimsa, de Santiago del Estero, por 98-86. El resultado no fue más amplio porque se relajó por momentos. No obstante, podrá festejar el fin de año en paz.

Regatas Corrientes, haciendo gala de su fortaleza como local (elevó el record a 10-1), dio cuentas anoche de Quimsa, al que venció por 98-86. Regatas, que hoy figura 8º, arrancó como amilanado y Quimsa no perdonó, escapándose 7-0 en dos minutos y fracción. Por entonces Reinick controlaba a Keep y sacaba ventajas en ataque; al tiempo que Brown, con su movilidad, complicaba a López.

Hasta que el equipo del parque Mitre esbozó una reacción con dos incursiones seguidas de Diego García. Y se puso a tiro (8-9) promediando el primer cuarto. Pero Quimsa apremió con la marca y las pérdidas regatenses fueron sucesivas (cinco en el segmento).

En consecuencia, la visita volvió a contar con ventaja en el score (15-10); aunque daba la sensación que Regatas no calentaba motores aún.

Pero en el segundo período el dominio varió a partir de la presencia en cancha de Román González. El pivote, una fuente confiable de rebotes (8 en el primer tiempo y 15 en el juego), generó desequilibrio con sus movimientos de espaldas al aro y cargó de faltas a los internos santiagueños; además de anotar 9 puntos en el parcial.

Así Regatas, mucho más lúcido en defensa, llegó a escaparse 40-28 y Quimsa parecía dejar llevarse por la corrientes, sin mostrar argumentos para desestabilizar a un conjunto de Gonzalo García que dominó ampliamente el duelo aéreo (20-9 en la etapa y 34-22 en el partido) y también en ese pasaje el score: 44-34.

Sin embargo, después de insinuar Regatas querer aplicarle una estocada a Quimsa, sufrió un bajón en su performance. Primero mató con las bombas de Diego García y Salles alcanzando una máxima que osciló en los 19 puntos (57-38...66-47). Pero después se relajó y dejó que la visita progrese aprovechando el pasaje inspirado de Sául (17 de sus 19 puntos los hizo en el complemento). Es cierto, el partido aparentaba dejar de serlo.

No obstante, Quimsa llegó a ponerse a nueve (76-67) a los 4 minutos del cuarto y definitivo período. Fue importante para achicar la brecha pasar a defender en zona, la última carta que se jugó Marcelo Richotti, DT santiagueño. Pero Regatas despertó del letargo con una ráfaga mortífera de Diego García, quien encontró como mejor ladero a Salles (4/5 triples). Y así cerró el juego con tranquilidad, quizás sin tanta amplitud en el score, pero sin dejar dudas en el juego.

Mucho valió la superada contienda aérea (34-22), la demoledora efectividad en triples (10/17) y el alto porcentaje en tiros de cancha (61.4%). También es de destacar lo de Román González (13 puntos y 14 rebotes), quien ya recaudó muchos aplausos del público correntino. Aunque el que se robó la noche fue Diego García, autor de 30 tantos y una efectividad tremenda: 5/6 triples, 6/9 dobles y 3/5 libres.

Ahora, Regatas podrá festejar las fiestas de fin de año en paz, anhelando que en 2007 el equipo dé el salto de calidad que se esperan con tantas figuras en su plantilla.

Síntesis
Regatas (98): Hernando Salles 21, Diego García 30, Ronald Selleaze 8, Roberto López 11, Jason Keep 6 (FI); Sebastián Acosta 9 y Román González 13 (x). DT: Gonzalo García.

Quimsa (86): Víctor Cajal 4, Julio Mázzaro 7, Erron Maxey 10, Robert Brown 16 (x), Alejandro Reinick 14 (FI); Fernando Small 6, Lucas Saúl 19, Cristian Amicucci 1, Sebastián Cabello 9 (x) y Enzo Ruiz 0. DT: Marcelo Richotti.

Parciales: 14-17, 44-34, 70-58
Arbitros: R. Settembrini y O. Martinetto.
Estadio: De los sueños – Corrientes.
Autor: Carlos Zeniquel (h) - Diario “época”