Tachale la ventaja

“Ojalá ganemos”, fue la frase que emitió Julio Mázzaro ayer al mediodía en la previa de la primera final de Liga Nacional entre Obras y Peñarol. El escolta sabía del poderío de su equipo, pero al mismo tiempo le brindaba un margen a una hipotética derrota.

Lo cierto es que en los playoffs hay que ganar y eso es lo que entendió y se marcó Peñarol como objetivo para conseguir llegar al tricampeonato. En la primera final hubo un equipo que sabía lo que se jugaba y otro que sintió los nervios y la presión de afrontar su primera final de la Liga.

Hay una imagen que refleja estas primeras líneas de la nota. Y esa foto se encuentra en el tercer cuarto cuando Mázzaro va al piso en mitad de cancha a buscar una pelota y Marcos Mata se tira encima del escolta tachero, le gana en la intención y se queda con la pelota que termina con un triple de Facundo Campazzo desde el córner derecho. Peñarol, con su cuarta aparición consecutiva en una final de Liga, sabía que no podía regalar nada, nunca se dio espacio a una derrota y jamás sintió la presión de tener que ganar un juego en Capital para robarse la ventaja de localía.

En el comienzo del partido Obras, el número uno de la fase regular, lució nervioso e impreciso ya que en apenas dos minutos de juego se vio abajo por 5-0, con una pérdida de balón, 0/2 de campo, 2 faltas personales y bajo mucha presión. La mala para el local se extendió debido a que Darren Fells sumó la segunda falta en el poste bajo; mientras que Leonardo Gutiérrez sumó el segundo triple para extender a 8-2.

El mal momento de Obras siguió golpeando al conjunto de Julio Lamas. En 5 minutos el nerviosismo de su primera aparición en una final de Liga Nacional pareció comerse al número uno. Una mala selección de campo, con un flojo 2/7 y muchas pérdidas en la construcción de las ofensivas. Para peor Juan Gutiérrez no gravitó ante Martín Leiva y apenas lanzó en una ocasión al aro y sin suerte.

Peñarol hizo valer su experiencia en definiciones y sus figuras aparecieron. Leo Gutiérrez fue el referente en el ataque con 9 puntos (3/5 en triples); mientras que Kyle Lamonte lo secundó y fue el encargado de penetrar y romper defensas. El extranjero de los milrayitas supo aprovechar los minutos, totalizó 7 puntos y su equipo gozó de una máxima de 10 puntos (21-11); aunque el golpe lo sintió con las dos faltas a Martín Leiva y otras dos a Facundo Campazzo.

En el segundo cuarto el local esbozó una reacción y rápidamente colocó un parcial de 5-0 para recortar el margen y quedar abajo por 21-23. El momento positivo de los tacheros se extendió porque ante la ausencia de Leiva la pintura marplatense quedó desprotegida, Así con la imagen de Alejandro Reinick tratando de cubrir el cristal, Juan Gutiérrez empezó a recibir juego; mientras que Tyler Field se transformó en el líder con 8 puntos y una volcada made in LeBron James.

Obras se sintió cómodo por primera vez en la noche y pese a la tercera infracción de Field cerró una corrida de 11-2. Peñarol buscó variantes, probó con Matías Ibarra pero la selección de tiro no fue buena con un 0/7 en triples en todo el cuarto. Leo Gutiérrez no pudo con su tiro a distancia; mientras que el equipo sufrió mucho ante las ausencias de Leiva, Campazzo y Lamonte. El local estableció un margen de 7 (37-30) pero la aparición de Lamonte le dio aire al equipo que colocó un parcial de 6-0 para cerrar el primer tiempo abajo por 36-37.

Los primeros minutos del complemento fueron a pedir de Peñarol que tuvo como figura determinante a Campazzo. Primero la visita sumó dos pérdidas en un minuto y medio, pero luego el base milrayitas se cargó el equipo al hombro y con penetraciones, corridas y triples empezó a torcer el rumbo de las acciones.

Obras, pese a igualarlo en 50, sufrió la quinta falta de Fells y la cuarta a Field. Y para aprovechar el momento Campazzo volvió a sumar en grande para cerrar el cuarto con un protagonismo que demandó 13 puntos. Volvió a buscar en la pintura pero castigó con triples para elevar a 61-52 ante un Obras que juntó pérdidas (5 en el cuarto), no movió el banco, no tuvo gol en Washam y Gutiérrez y apenas se mantuvo con Mázzaro (7).

Pero en los últimos diez minutos Peñarol empezó a cerrar lo que había construido. Con Mata primero y luego el esfuerzo de Reinick en la pintura llevó la máxima a 17 (77-60). Obras fue un canto a la desorganización. Pérdidas, nerviosismo y escasa efectividad golpearon los sueños del local.

Pero el local no bajó los brazos. Buscó la última chance y la encontró. El tachero empezó a descontar con libres (fue 15 veces a la línea para convertir 9 lanzamientos) y Peñarol tardó una eternidad en pedir un tiempo muerto para detener a su rival. Así cuando se acordó ya era demasiado tarde. Parcial de 16-0 para quedar a tiro con apenas 40 segundos (76-77).

Y el final fue a todo o nada; aunque Peñarol de la mano de Campazzo y Mata nunca entregó la ventaja; mientras que Obras tuvo la última chance pero la perdió cuando un error de Martín Osimani le terminó por costar el partido al tachero.

Síntesis
Obras Sanitarias (78): Martín Osimani 7, Julio Mázzaro 10, Tony Washam 14, Juan Gutiérrez 22, Darren Fells 4 (x) (FI), Tyler Field 8 (x), Pablo Espinoza 5, Alejandro Konsztadt 8, Alexis Elsener 0. Entrenador: Julio Lamas.

Peñarol (80): Facundo Campazzo 18, Kyle Lamonte 19, Marcos Mata 10, Leonardo Gutiérrez 21, Martín Leiva 3 (FI), Alejandro Reinick 5, Matías Ibarra 2, Franco Giorgetti 2, Selem Safar 0, Pablo Barrios 0. Entrenador: Sergio Hernández.

Parciales: 16-23, 37-36 y 52-61.
Árbitros: Pablo Estévez, Diego Rougier y Fabricio Vito.
Estadio: Obras.
Serie: Peñarol 1-0.
Próximo juego: miércoles 16 en Obras.

Foto: Majo Gil (mjgi@pickandroll.net)

Juan Manuel Rodríguez
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