Obras (1) - Peñarol (3) (5to juego - Final)

Esta noche será el primer partido de la serie que puede tener un campeón. Si Peñarol gana se consagra en una temporada de alto nivel y mucha paridad. A Obras no le queda otra que ganar para seguir con vida sabiendo además que tiene que ganar tres partidos seguidos para ser campeón.

Esta diferencia sustancial en la previa lo pone a Obras con un cúmulo de presión inédito. Ya los tuvo en los primeros juegos de local, pero ahora se repite con el agregado del “todo o nada”. Da la sensación que por diferentes motivos, Obras nunca pudo disfrutar la serie final. Esta tensión de tener que ganar, primero porque es local, después para evitar la barrida, ahora para que no le den la vuelta en su casa, ha conspirado todo el tiempo contra sus propias intenciones de hacer las cosas como las hizo en la fase regular. De manera natural.

Existe una alta responsabilidad en Peñarol de sacar a Obras de esa “naturalidad”, de llevarlo a un terreno de individualidades, de generarle temor, de sacarlo de su eje, pero fue también Obras el que se convirtió en una presa sin luchar para que eso ocurra.

Empezando por Julio Lamas y el uso del banco de suplentes. Tomemos como parámetro la segunda fase de la serie regular en donde los promedios de minutos fueron: Elsener 16:11, Espinoza 18:13, Tyler Field 22:00, Ale Konsztadt 26:38. Esos guarismos bajaron a los siguientes números en los 4 juegos de la final: Elsener (6:30 en 3 juegos), Espinoza (14:22 en 3 juegos), Tyler Field (16:30) y Ale Konsztadt (24:45). Esto incluye dos tiempos suplementarios.

Además Obras bajó un punto las asistencias de la serie regular de 14.0 a 13.0 un dato no significativo pero si la cantidad de pérdidas que pasaron de 12.5 a 16.0 perdidas por juego. El incremento de minutos de los jugadores titulares no les trajo más gol, ni más defensa, ni mejor toma de decisiones. Simplemente Obras corrió un poco su eje (tampoco es otro equipo) pero si algo diferente al que mostró su solidez en la fase regular. Por eso hablamos que no “disfruta” la final sino que esta en plena lucha.

Por esta situación, Julio Lamas reconoció a Pick and Roll radio que para él Espinoza no estaba jugando poco (fue en la previa del partido cuatro donde luego Espinoza no jugó) mientras que en el caso de Elsener adujo que no jugó el partido tres porque la dupla Mázzaro-Washam le estaba dando resultados en ofensiva.

Una de las preguntas que más ronda en el aire es ¿Cómo hará Obras para recuperarse de la angustia del cuarto juego? Porque estuvo muy cerca de dar el batacazo y levantar el 0-2 ganando todo de visitante, no obstante perdió el 4to y determinó el triple match point para Peñarol. Según Lamas “la serie está viva pero el 4to juego era un partido clave, o empatamos o ellos tenía esa triple oportunidad de salir campeón”.

En virtud del conocimiento de cada equipo Lamas anticipó que “no habrá cosas nuevas para hacer en el juego cinco de la serie, sorpresa no va a haber, no haremos nada que ellos no hayan visto, puede existir alguna cosa que se utilice más que otra”.

Mientras que no quiso opinar de la situación arbitral y lo dejó en manos del periodismo “Uds son periodistas eso lo tienen que decir ustedes”, disparó Lamas. No obstante al referirse al cierre de juego del cuarto partido el técnico de Obras dijo que “Peñarol disfrutó de muchos tiros libres para cerrar el juego”. El Coach se refería a 8/14 en libres que Peñarol tuvo en el último cuarto del partido del miércoles pasado.

Estas circunstancias que alteraron a la gente, dirigentes e incluso periodistas viendo una mano arbitral para ayuda de un contendiente u otro es parte de la oligofrenia conque vivimos los argentinos. Juan Gutiérrez en la victoria del juego 3 hizo un solo doble de cancha y tiró 21 tiros libres (17/21), allí nadie puntualizó la cantidad de veces que el ala pivote de Obras fue a la línea.

Del mismo modo se pueden indicar al menos cincuenta situaciones por partido. Una tras otra cada decisión arbitral es reprochable. Se equivocan los árbitros como se equivocan los jugadores y los técnicos. Pero el público debería saber que de haber un sentido manifiesto de los árbitros para perjudicar o beneficiar a un equipo no lo harían evidente, lo pueden hacer sin que nadie se de cuenta ¿Por qué se expondrían al reproche, pudiendo lograr su cometido de forma silenciosa?. Sola esta pregunta derriba todo mito del tema arbitral y las “ayudas”. Y créanme que hay cien formas para que un árbitro reviente un equipo sin que el público se de cuenta.

Desde ya que fue falta de Leo Gutiérrez sobre Washam en el tiro del final. Dos faltas hubo, una antes de recibir y otra en el tiro, así como también hubo faltas no cobradas en el primer, segundo y tercer cuarto. ¿Alguien podría indicar si las faltas anteriores pesan menos que las finales?, si todas tiene el mismo derivado.

El punto que el arbitraje debería hablar es la condición de reproche que los protagonistas tienen y en eso estoy de acuerdo con quienes levantan la bandera del juego limpio. Los jugadores y los técnicos tienen que llamarse al silencio y los árbitros al reglamento porque los reproches de Franco Giorgetti y Alexis Elsener deberían tener el mismo peso que las protestas de Leo Gutiérrez y Julio Lamas. Pero si la protesta es de un juvenil hay sanción mientras que los referentes se la pasan protestando y haciendo calentar a los de afuera.

Por el lado de Peñarol, para esta noche la duda radica en saber si podrá contar con Marcos Mata y de hacerlo, en qué grado de recuperación de su fuerte contractura en los isquiotibiales. Desde el jueves el alero titular estuvo con trabajos de kinesiología y reposo para bajar el edema que la contractura ocasionó. De tal modo se espera que el músculo tenga la suficiente elasticidad para darle a Mata la posibilidad de ingresar al campo de juego y ser parte del partido. En el entrenamiento del mediodía de hoy habrá un panorama más claro al respecto.

Finalmente la situación que se presenta con el reemplazo de Lamonte es otra de las incógnitas que presenta el juego cinco. La dirigencia de Peñarol ya arregló con David Jackson que terminó ayer de jugar en Brasil y esta llegando a Buenos Aires hoy al mediodía. Si llega el pase internacional y la liberación por parte del Flamengo, la AdC deberá hacer los trámites de habilitación para darle la chance de que esta noche desde las 22.00 este a las órdenes de Sergio Hernández.

Para el conjunto marplatense, que sabe que no jugó bien en los dos juegos en Mar del Plata la mejor noticia es el resultado de la serie, que le da la posibilidad de perder hasta dos partidos. Sin Lamonte y con Mata en duda, sin la certeza de tener reemplazo del foráneo, habiendo sufrido mucho como local, aún así el 3-1 le da la confianza para poder tomar riesgos que Obras no tiene. Sabiendo que está en las puertas de un hecho histórico no es menor contar con algo de ventaja en el rubro “presión”, una palabra que se puso de moda en virtud de la paridad de estos dos tremendos equipos que nos regalan una enorme serie final.

Posibles formaciones
Obras Sanitarias: Martín Osimani, Julio Mázzaro, Tony Washam, Juan Gutiérrez y Darren Fells. DT Julio Lamas.

Peñarol: Facundo Campazzo, Selem Sadar, Leo Gutiérrez, Pablo Barrios y Martín Leiva. DT Sergio Hernández

Hora: 22.00 (TyC Sports)
Árbitros: Daniel Rodrigo, Alejandro Chitti y Fernando Sampietro
Estadio: Obras Sanitarias.
Seguilo por: Desde las 20.00 Pick and Roll radio con los relatos de Matías Traversa y los comentarios de Pablo Tosal por FM Hola 104.5 o www.fmhola.com, La Zona Pintada FM Urquiza 91,7 o www.fmurquiza.com. LU6 www.lu6.com, Los Martines FM 101.9 o www.losmartines.com.ar.

Pablo Tosal
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