Robinson: “Quiero terminar mi carrera jugando en la ‘A’ con Argentino”

El pivote nacido en Charleston (South Carolina) el 8 de marzo de 1972, actualmente tiene 40 años y apenas supera los dos metros de estatura. En dialogo con DEMOCRACIA, dijo que confía en poder terminar su carrera en Argentino, dejándolo en la máxima categoría la próxima temporada.

- ¿Cuánto hace que estás en el país?
- Hace ya once años que estoy en la Argentina. Yo ya había estado en la Liga Nacional “A” con Argentino cuando se jugaba en la Cúpula de la Sociedad Rural. Tengo muy buenos recuerdos de los compañeros que tuve y destaco la amistad que hice en su momento con Fred Williams, un gran jugador con quien hicimos una dupla goleadora y muy querible por todos. Después jugué en Corriente (2 años), La Pampa (3), Paraná (2 años y medio) y Monte Hermoso (6 meses).
Hoy siento una gran alegría por haber vuelto a jugar en Argentino y haberlo llevado a la Liga Nacional “A”. Jugar en la elite del basquetbol de este país es muy hermoso. Mi idea es jugar en la “A” con Argentino, volver después de este receso a vestir esta camiseta. Mi meta es jugar un año más y después me retiro. Pero quiero de todo corazón despedirme en este club y logrando un cometido: mantenerlo en la categoría. Es mi desafío final. Llevo 18 años como basquetbolista profesional, creo que es demasiado.

- ¿Pensaste que ibas a ser el goleador del equipo?
- Haber sido el goleador del equipo en este campeonato que pasó fue una circunstancia del juego. Depende el partido, yo hacía más o menos goles. Había clubes que me conocían y me defendían muy bien y otros que eran permeables a los sistemas ofensivos que hacía mi entrenador para que yo convirtiera. En otros juegos goleaba Alejandro Spalla, Juan Cangelosi o Julián Olmedo, todo dependía de cómo se presentara la noche. Yo me sentí cómodo siempre en Argentino. El técnico, los jugadores y los dirigentes confiaron en mí y ese respaldo me hizo sentir muy cómodo y ayudó para que alcanzara el máximo de mi rendimiento en el final del campeonato que era donde más el equipo me necesitaba.

- ¿Cómo es el basquetbol en tu país y cómo lo ves acá?
- El básquet acá es como el fútbol americano allá. La gente lo vive con mucha pasión, se encarniza con este deporte, sufre y goza al mismo tiempo. Esto es lo fantástico del basquetbol en la Argentina. Acá nos conocen a nosotros como allá a Manu Ginóbili y Luis Scola.

- ¿Qué diferencia hay en la alimentación?
- No hay mucha diferencia entre la alimentación de Estados Unidos y lo que yo comí siempre acá. Destaco el asado, mucho asado en este país y muy sabroso. Después me gusta mucho el pollo, como esto casi todos los días, aunque la carne es demasiado buena. Allá, en mi país, no se come seguido y a veces cuesta conseguir de buena calidad.

- ¿Te sentís cómodo acá?
- Argentina es mi segunda casa. Yo adoro este país. La gente me quiere mucho. Siempre me demostró cariño. En cuanto a Junín yo sé que se quedaron tristes cuando me fui la primera vez, pero necesitaba seguir jugando en la “A”. Esta fue mi revancha. Retornar y devolverle la alegría en los rostros a la gente de Argentino me llena de satisfacción. Por eso me gustaría quedarme una temporada más, hacer el esfuerzo de mantener al equipo en primera y retirarme con todos los honores, que se me recuerde para siempre.

- ¿Volvés?
- Me reúno en estos días con el presidente del club y creo que el fin de semana estoy volando hacia Estados Unidos. Me esperan mi esposa (Reggina), una hija de 18 años que ya va a la Universidad (Jeteisha) y un hijo de 13 que juega al basquetbol (Jemicua). Es muy difícil estar lejos, pero con Internet me conecto cuatro veces por semana (utiliza Skype). Pero ellos, en su momento, entendieron que este era mi sueño, jugar al basquetbol y ser conocido fuera de mi país y siempre me apoyaron. Yo quiero volver”, cerró Robinson.

Fuente: Diario Democracia.