Restaban 1:06 para el final del partido. Lanús dominaba y estaba 72-58 al frente. Con 15 de ventaja, Silvio Santander pidió tiempo muerto y la bronca en el banco de Boca estalló.
Carlos Duro y Néstor García estuvieron el tiempo que duró el minutos a los gritos, mirando al banco de Lanús, sin darle indicaciones a sus jugadores, suponiendo que la solicitud del DT granate rosaba la cargada, con el partido definido.
Al finalizar el juego, García saludó a los árbitros, y ante el pedido de disculpas de Santander, quedaron los dos DT cara a cara. El bahiense le recriminó a los gritos, en la cancha, el pedido del tiempo muerto con el partido liquidado. La calentura del Che se notó claramente.
En la salida del vestuario de Lanús, Silvio Santander le contó a Pick and Roll: “Pido disculpas públicamente a la gente de Boca. No soy de hacer estas cosas. Sólo pensé en la diferencia de puntos”.