Lo de Peñarol fue más que “Safar”

El cotejo inició mejor para el visitante, que sin apresurar sus ofensivas consiguió dispararse al frente 6-0, en los primeros dos minutos y medio, ante un dueño de casa que no encontró los caminos para anotar, y cosechó un magro 0/4 en ese arranque.

Peñarol buscó manejar los ritmos del match, entendiendo la corta rotación posible a causa de las lesiones. Para Bahía Estudiantes fue remar de atrás, aunque pasado el promedio del cuarto Sergio Hernández se vio obligado a solicitar un tiempo muerto, cuando los bahienses se pusieron a tres (7-10).

En el regreso del mismo el local logró pasar al frente (11-10), pero con un Leonardo Gutiérrez inspirado (nueve puntos seguidos), el conjunto marplatense cerró mejor el primer parcial y se metió con ventaja de cinco al segundo periodo, 22 a 17.

La continuidad del primer tiempo no modificaría en demasía el trámite del cotejo. Rápidamente Peñarol pudo ampliar la distancia, que pisó los 16 tantos en los primeros tres minutos (19-35, triple de Safar).

El huésped probó con una defensa zonal para mantener a raya a su rival, pero la misma mostró falencias sobre su poste alto, elemento que encendió la esperanza anfitriona, pese a los problemas que tuvo en el otro cilindro para controlar el lanzamiento exterior del milrayitas (terminó el 1er tiempo con 8/15, 53%).

Los orientados técnicamente por Sergio Hernández llegaron a alejarse por 16 (40-24) en el promedio de ese capítulo, aunque un parcial de 16-5 (dos triples seguidos de Blanchard incluidos) de allí al final dejó mejor perfilado a los de Pablo Coleffi, que recostando su juego en la pintura salieron del mal momento y encararon el descanso largo en desventaja de cinco, 40 a 45.

Con el retorno de zona de vestuarios el partido mantuvo la paridad. Blanchard se cargó el equipo al hombro (6ptos y 2 reb off en 2min) y rápidamente comenzaron a prestarse el liderazgo del match.

Peñarol debió sentar con 4 faltas a Leiva (6:18, 52-53), y a partir de allí el visitante mutó su estructura, sin un centro definido y abriendo la cancha para generar espacios (Campazzo, Safar, Teague, Mata y Gutiérrez).

Bahía Estudiantes perdió la brújula, dejó de poner el balón en la pintura, y cuando quiso volver a sus fuentes, el huésped supo como resguardar sus últimos metros, cerrando aún más el trámite.

Pese a la rotación corta y al problema de faltas de Leiva, el marplatense se las ingenió para ingresar al capítulo final arriba por la mínima, 66 a 65.

Más pensante que su rival, Peñarol aprovechó los errores ajenos para capitalizarlos, disparándose por nueve tantos en los primeros dos minutos del cuarto periodo (65-74), apoyándose en una buena intervención de Leonardo Gutiérrez.

Una vez más el dueño de casa equivocó los caminos, y trató desde el perímetro ejecutar lo que en teoría debía resolverse en el poste bajo. Coleffi mantuvo a Juan Manuel Torres gran parte del periodo en el banco, y con un Williams apagado y Nilon muy intermitente, las variantes ofensivas se volvieron acotadas.

Lo que comenzó Gutiérrez lo finalizó Safar, y Peñarol, pese a las lesiones y a la acumulación de faltas de Leiva, terminó la noche sin mayores complicaciones, volviendo al triunfo por 91 a 78.

Síntesis
Bahía Estudiantes (78): Lucas Faggiano 6, Federico Ferrini 1, Jason Williams 10, Víctor Baldo 2 y Juan Manuel Torres 15 (inicial); Lavell Blanchard 20, Lee Nailon 18, Mauro Mierez 6 y Lucio Redivo 0. DT: Pablo Coleffi.

Peñarol (91): Facundo Campazzo 7, David Teague 13, Marcos Mata 12, Leonardo Gutiérrez 21 y Martín Leiva 13 (inicial); Lisandro Rasio 2, Selem Safar 23 y Fernando Podestá 0. DT: Sergio Hernández.

Parciales: 17-22 / 40-45 / 65-66.
Árbitros: Chiti – Bautista.
Estadio: Dr. Osvaldo Casanova.

Foto: Ligateunafoto.com

Emanuel Niel
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