Juan Espil, Pepe Sánchez y Pablo Coleffi rodeaban la camilla, en el vestuario, donde estaba apoyada la planilla técnica. Hablaban, cambiaban opiniones. Había, lógicamente, caras de preocupación.
El técnico se apartó y entre sus hojas tenía una con los restantes resultados. --¿Mirás más con mayor atención al resto o lo que hace tu equipo?
--Nooo... Me fijo en nosotros. Tenemos que salir de esta nube de juego. No nos animamos a ganarle a Peñarol. Nos faltó determinación. Y creo que terminó más entero Peñarol que nosotros. Igual, el Peñarol de hoy (por ayer) creo que era ganable. Nos faltó el puño del nocaut. --Aun con un plantel más corto, la calidad la mantiene intacta.
--Sí. Y nosotros tiramos 21 por ciento en triples y 57 en libres. Es muy difícil ganar así... De todas maneras, el equipo no se entrega y le pone la cara a esta situación, pero estamos limitados. Y se nota. --¿Estás pensando más en lo que vendrá después del receso que en lo que queda para terminar el año calendario?
--No, no. Tenemos que completar los tres partidos que quedan de la mejor manera, sabiendo que Peñarol será durísimo. Pero el miércoles y viernes no podemos errarle. Tenemos que irnos al receso en el pelotón de los equipos que pelean. Después se reconstruirá el equipo para cubrir las bajas.