Manu los despertó y Parker lo definió

Al igual que la última vez que se habían enfrentado, los Hornets jugaron por encima de su nivel y de ese anteúltimo lugar que ostentan en el escalafón del Oeste, aunque esta vez fue final feliz para los Spurs, quienes ganaron 106 a 102 para alcanzar su sexto triunfo en forma consecutiva y treparse a la segunda posición de la conferencia.

New Orleans, rivales divisionales, había cantado victoria en el choque del pasado 7 de enero, con un impecable Greivis Vásquez y Eric Gordon como punta de lanza. Anoche San Antonio supo cambiar a tiempo para que no sucediera algo similar. En la segunda mitad, con una mayor contracción defensiva – dejaron a los Hornets en 38 puntos -, más la aparición de Tony Parker (10 tantos en el último cuarto) y las siempre decisivas acciones de Emanuel Ginóbili.

Manu volvió anoche luego de cuatro partidos ausente por lesión y terminó el partido con 9 puntos, producto de 3/7 de cancha y 3/5 en libres, 5 asistencias, 3 robos, 1 rebote y 1 tapa en 17 minutos de juego. Pero al margen de sus estadísticas, el bahiense fue vital en un tramo decisivo para los Spurs, con un gran cierre del tercer cuarto en el que asistió en un par de ocasiones, recuperó un balón, metió una tapa enorme y generó mucho juego. El local se iría al último cuarto abajo por uno (79-78) cuando llegó a perder 53-43.

Los doce minutos finales fueron todos de los Spurs, quienes esta vez no contaron con Gregg Popovich en el banco (los dirigió el asistente Mike Budenholzer). De la mano de un inspirado Parker el local volvió a ser ese equipo que no por nada está segundo. Con 6 puntos consecutivos encabezó un parcial de 16-3 con el que pasaron del 85-86 al 101-89, a falta de 1:42, la máxima de la noche.

En ese momento Monty Williams, entrenador de New Orleans, desplegó la bandera blanca y sacó a todos sus titulares. Sin embargo los reservas le dieron una gran sorpresa con un parcial de 8-0 que instaló el miedo en todo el AT&T Center. Por suerte solo se acercaron a 3, y Ginóbili no falló desde la línea.

El brasileño Tiago Splitter fue el máximo anotador de la noche con 25 puntos; Parker cerró su planilla con 24 y 13 asistencias, mientras que Stephen Jackson fue clave con sus 15 unidades. Por el lado de los Hornets (14-28), la rompió Vásquez con 17 tantos, 11 pases gol y 5 rebotes, Gordon aportó otros 17 tantos, al tiempo que Ryan Anderson sumó 16 desde el banco.

Debut victorioso

Los Phoenix Suns comenzaron su nueva etapa con el pie derecho. En el primer partido de Lindsey Hunter al frente del equipo, luego que la dirigencia llegara a un acuerdo para la salida de Alvin Gentry, los de Luis Scola derrotaron a los Sacramento Kings 106 a 96.

El Luifa fue el máximo anotador de la noche con 21 puntos, producto de 9/13 de cancha y 3/4 en libres. Asimismo tomó 7 rebotes y repartió 4 asistencias en 29 minutos de juego. Los Suns, últimos en el Oeste junto a New Orleans con récord de 14-28, llegaban al partido con siete derrotas en sus últimos ocho encuentros.

Luego del peor arranque de su historia en 25 años Robert Saber (dueño) y compañía decidieron cambiar el rumbo, por l que Hunter quedará como interine por lo que resta de la temporada. Habrá que esperar para ver si también se meten en el mercado antes de la fecha límite de traspasos (21 de febrero a las 15 hs del Este de los EE.UU).

Phoenix tuvo un último cuarto a toda orquesta, que ganaron 32-19 y fue lo que inclinó la balanza a su favor. El aporte del banco fue de suma importancia, con Michael Beasley encabezando a los suplentes con 19 puntos, seguido de Shannon Brown con 12 y Markieff Moris con 10. Mientras tanto, el polaco Marcin Gortat anotó 12 tantos al igual que Gran Dragic, quien además sumó 11 asistencias.

En Sacramento, donde se confirmó la venta de la franquicia a un grupo empresario de Seattle, DeMarcus Cousins se destacó con 15 puntos, 15 rebotes y 5 asistencias, Tyreke Evans aportó 16 tantos, al tiempo que Jame Johnson sumó 14 desde el banco y Thomas Robinson otros 12 más 14 rebotes.

Houston volvió a perder

Fue solo un espejismo lo que ocurrió el lunes. Los Rockets habían cortado una racha de siete derrotas consecutivas en Charlotte pero anoche volvieron a caer, esta vez por 105 a 95 ante los Denver Nuggets, un rival al que tienen cerca en la conferencia Oeste.

Con esta nueva derrota, la octava en sus últimas diez presentaciones, los dirigidos por Kevin McHale se mantienen octavos con un récord del 50% (22-22) y quedaron a 4 juegos de los Nuggets (26-18), sextos en el escalafón.

Carlos Delfino estuvo durante 31 minutos en cancha, en los cuales sumó 15 puntos, con 3/4 endobles y 3/8 en triples, 3 rebotes, 1 asistencia y 1 recupero. James Harden, como de costumbre, fue el máximo anotador de los texanos con 23 tantos, a los que les agregó 7 pases gol.

En Denver (ganó 8 de sus últimos 10), el base Ty Lawson fue autor de 21 puntos, seguido por Wilson Chandler, quien desde el banco aportó otros 20. Por su parte, Andre Iguodala y JaVale McGee metieron 14 tantos cada uno.

Sebastián Ciano
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