Volcan: “Vamos construyendo partido a partido”

“Gimnasia tuvo un desarrollo aceptable como visitante. Por supuesto que ante Peñarol de Mar del Plata tuvimos un mal porcentaje de campo. Ahora, si bien hay cuatro encuentros como local, vamos construyendo partido a partido. De esa manera, podremos corregir errores”, sostuvo el técnico Miguel Volcan Sánchez, de cara a los cuatro compromisos consecutivos que afrontará el “Verde” a partir de este viernes, por la 25ª fecha de la segunda fase de la Liga Nacional de Básquetbol.

Así, el entrenador de Gimnasia Indalo retomó los trabajos en el día de ayer, donde se iba a tener un panorama más certero acerca del escolta David Jackson, quien el día del partido ante Peñarol sufrió un cambio de temperatura corporal que requirió su observación en una clínica privada.

“Ante Peñarol, Jackson jugó disminuido físicamente, pero él quería estar presente. Ahora resta saber qué es lo que tiene con certeza, porque en Mar del Plata sufrió algo parecido a un cuadro hipotérmico. Entonces se requieren estudios más específicos para saber su situación”, explicó el DT.

Respecto de Roberto Gabini, el entrenador priorizó la salud del nicoleño por encima de los compromisos.

“Esta semana, Roberto se suma a los trabajos con el resto del equipo. Por supuesto que con una carga menor, porque con él se debe realizar un trabajo progresivo y de recuperación. A veces, por ansiedad, se paga caro el acortar los tiempos de un jugador con las características de Roberto, quien demostró ser fuerte físicamente. No queremos apurarlo, dado que puede tener sobrecarga en otra parte del cuerpo”, resaltó.

Gimnasia se ubica en el 10º lugar, y el viernes se medirá como local ante Sionista de Paraná (7° puesto), equipo que en su última presentación cayó en su campo de juego ante Argentino de Junín por 79 a 87.

El domingo, el Socios Fundadores será escenario del partido frente al líder Regatas Corrientes, para continuar el fixture el próximo fin de semana con las visitas de La Unión de Formosa y Unión Progresista de Villa Angela.

Fuente: El Patagónico