Peñarol arrasa de a ráfagas

Por momentos (los más) mostró la actitud y la estirpe intacta del tricampeón. Por momento (los menos) mostró la irregularidad que lo ha caracterizado a lo largo de todo el año. Peñarol tiene esos baches que son profundos pero de los que sale con una facilidad que asusta.

Quimsa es un equipo que tiene gol en sus manos y cuando lo encuentra vulnera cualquier defensa. Hoy dio vuelta el partido con Peñarol en Mar del Plata, pero sus virtudes fueron momentáneas, no tuvo respuestas como equipo cuando tuvo que bancar el partido con la defensa y su ataque quedó reducido a la anarquía. Terminó forzando casi todo y perdió con más amplitud de los 12 puntos finales.

Para Sergio Hernández tenerlo a Marcos Mata en buen nivel (físico) es garantía de ir encontrando el equipo que puede sostener las ambiciones de volver a salir campeón. El alero de la selección que arrastró las últimas semanas dolores por una hernia de disco terminó siendo el jugador que más minutos jugó en su equipo (31:50). Y Mata en esta serie es clave porque tiene que frenar al mejor jugador ofensivo del rival: Jimmy Baxter.

El alero foráneo de Quimsa tomó muchos tiros con porcentaje irregular (8/21 de cancha) pero es uno de los pocos que tira del carro. No pudo encontrar el aro y Mata tiene un duelo de 5 estrellas con él. De todos modos Baxter terminó siendo el goleador, mayor valoración y más minutos jugados en su equipo.

Para esta serie las dificultades por velocidad para contener a Campazzo eran evidentes en la estrategia. Y se cumplieron. Nadie pudo con Campazzo. Pasaron diferentes marcadores y el base de Peñarol pudo con casi todos, pero el problema para Quimsa no fue Campazzo, fue que se le escapo también el resto. Sobre todo Leo Gutiérrez. El múltiple campeón tuvo nuevamente una actuación descollante. Jugando muy duro en defensa, sufriendo un primer cuarto malo pero creciendo hasta terminar siendo decisivo en el partido. Con 21 pts 5/8 en triples, 3/6 en dobles vulneró la defensa rival en momento críticos, bien al estilo Leo Gutiérrez.

Finalmente esta pintura de trazos gruesos en las generalidades descubre a un quinteto inicial fusionado muy solo. El banco de relevos no estuvo fino en la noche del juego uno. Aunque Sebastián Vega haya terminado con 12 puntos, todos ellos en el último cuarto con resultado definido.

Ahora si: la crónica.

Peñarol salió matando de entrada con mucho gol en su perímetro. Campazzo fue el amo y señor de la ofensiva del primer cuarto. Terminó con 13 puntos enloqueciendo a todos. Acompañado por un activo David Teague y Marcos Mata.

La defensa de Peñarol jugó muy fuerte sobre la línea de pases yendo a buscar a los receptores casi hasta el medio campo. Negaron la llegada de la pelota a Williams y los tiros fueron todos de frente y con bajos porcentajes (2/6 en triples y 5/14 en dobles). Sacaron ventaja de 14 (27-13) y el cuarto cerró con un triple contra el tablero de Nicolás Aguirre.

Para el segundo cuarto Sergio Hernández dispuso una formación en verdad muy rara: Teague, Mata, Rasio, Giorgetti y Leiva. Sin bases y un escolta. La apuesta le salió mal por dos motivos: la propia impericia de generar juego y al mismo tiempo al rival se le abrió el aro.

Mientras Peñarol comenzó a desilacharse Quimsa encontró una ráfaga furiosa de gol. Dos triples de Baxter, otro de Aguirre, uno más de Mojica y otro de Lo Grippo. En apenas 5 minutos y con un parcial 19-0 Quimsa lo dio vuelta por completo y pasó a ganar 27-32. Campazzo retornó al juego en el 27-27, pero el parcial se extendió un poco más a 30-37 cuando Leo Gutiérrez cortó la sequía con un triple.

Pero no fue hasta la entrada de Selem Safar que Peñarol no despegó. El zurdo entró con la mano encendida y metió tres triples seguidos que hicieron estallar el Polideportivo. Peñarol reacomodó su defensa mientras Leo y Mata con sendos triples ayudaron a Safar. De perder por 7 el “Milrayitas” pasó a ganar 41-37 con parcial 11-0. Finalmente se quedó con el primer tiempo por 10: 53-43

En el tercer cuarto el local no le di posibilidades de reacción a la visita. El “ataque” desde la defensa, tomando la iniciativa, generando que Quimsa juegue incómodo fue la idea pertinaz que sostuvo Peñarol. Y le salió redondo. Penca Aguirre quedó embarullado, a veces con Mojica de base, el juego santiagueño partido y solo pudo defenderse por acciones individuales. Peñarol entonces se lo comió de a bocados.

Leo Gutiérrez dio un recital de puntos de todos los colores y las formas. Teague y Leiva lo ayudaron a marcar el parcial 25-14 del tercer cuarto conque se sentenció el partido. No hubo respuestas desde el banco para Quimsa. Todos erráticos. Titulares y suplentes.

El cuarto final es una mera estadística. Quimsa entró abajo por 21 (78-57) y no pudo hacer nada al respecto. Ambos equipos rotaron sus piezas y los suplentes salieron a terminar de ponerle cifras al juego. El punto uno de la serie ya estaba definido por las furiosas ráfagas que Peñarol había impuesto.

Síntesis
Peñarol (92): Facundo Campazzo 20, David Teague 13, Marcos Mata 10, Leonardo Gutiérrez 21 y Martín Leiva 6 (FI) Lisandro Rasio 8, Lucas Tischer 1, Selem Safar 13, Franco Giorgetti 0 y Matías Ibarra 0. DT: Sergio Hernández.

Quimsa (80): Nicolás Aguirre 13, Javier Mojica 7, Jimmy Baxter 21, Diego Lo Grippo 9 y James Williams 9 (FI) Damian Tintorelli 3, Eduardo Villares 4, Sebastián Vega 12, Juan Pablo Cantero 2 y Gabriel Deck 0. DT: Fabio Demti.

Parciales: 27-16, 53-43 y 78-57
Árbitros: Daniel Rodrigo, Diego Rougier y Rodrigo Castillo
Estadio: Polideportivo “Islas Malvinas”

Foto: Majo Gil (@MajoPick // mjgil@pickandroll.com.ar)
Crónica: Pablo Tosal (@pablotosal)