Una nueva oportunidad para Scola

Pese a jugar en el valle del sol, la temporada pasada estuvo cubierta de nubes para Luis Scola en un equipo en el que se acostumbró a perder y que no tuvo objetivos durante gran parte del año. Hoy, el Luifa ve renovadas sus esperanzas de cara a la 2013/14 con su traspaso a los Indiana Pacers, finalista de la conferencia Este y candidato firme a pelear por el Larry O’Brien.

“Mis fuentes me dicen que hay acuerdo entre Soles y Marcapasos, los jefazos (NBA) dieron el pulgar arriba y yo me voy derecho a pelear el anillo”. Así anunció la noticia Scola desde su cuenta de Twitter. El hecho de jugar por cosas importantes hace que la temporada tenga otro brillo, y si bien nadie nunca se atreverá a dudar de la competitividad del Luifa, el pertenecer a un equipo con aspiraciones seguramente lo predispone de otra manera en la previa.

Es una gran oportunidad para Scola de volver a pelear por el título como en la época de los Houston Rockets. En Phoenix se encontró con un equipo que no estuvo bien armado y jamás encontró una forma de juego, cambio de técnico mediante (se fue Alvin Gentry y en su lugar llegó Lindsey Hunter).

El Luifa llega a un plantel jerarquizado, que tuvo en jaque nada menos que a los a posteriori campeones Miami Heat, luego de forzar un séptimo partido en las finales del Este. Seguramente saltaría desde el banco de suplentes, como relevo de David West (renovó por tres años) o Roy Hibbert, ala pivot y pivot titulares de Indiana, respectivamente. En la 2012/13, el ex ala pivot de New Orleans tuvo un promedio de 33.4 minutos, el tercero más alto de los Pacers, al tiempo que el pivot jugó 28.7 minutos por noche.

Asimismo, el juego del equipo de Frank Vogel encaja muy bien con el estilo de Scola, y viceversa, sobre todo si se lo compara a la anarquía propuesta en Phoenix. Desde la sunción del actual Dt en 2011 (tras el despido de Jim O´Brien) los Pacers comenzaron a ganarse un lugar en el Este desplegando un estilo de conjunto, defensa (permitió solo 90.7 puntos por noche, segundo mejor registro de la NBA ) y solidaridad en el que cada uno aporta su cuenta en pos de un bien común. En ese contexto, el Luifa es un suplente de lujo.

Si bien Vogel demostró ser un muy buen entrenador, el padre de la criatura es Larry Bird, quien este año vuelve a tomar las riendas de la dirigencia del equipo. Nombrado el ejecutivo del año en la 2010/11, la gloria de los Boston Celtics fue quien, de a poco, formó el plantel que hoy se mantiene entre los mejores de la NBA; Apoyó a Vogel tras el muy buen trabajo en su interinato, contrató a Hibbert en 2008 y West en 2011, drafteó a Paul George y Lance Stephenson (2010), y si bien envió a Kawhi Leonard a los San Antonio Spurs, a cambio se hizo de George Hill, hoy miembro del equipo titular.

Ahora, entre sus nuevas adhesiones se encuentra Scola junto a Chris Copeland, ex compañero de Pablo Prigioni en los New York Knicks, otro muy buen suplente para el grupo.

En la pasada temporada con los Suns, Scola - tiene dos años más de contrato, el segundo parcialmente garantido - tuvo una media de 12.8 puntos, 6.6 rebotes y 2.2 asistencias tras haber jugados los 82 partidos de la temporada regular (su equipo no se clasificó a los playoff).

Ahora tiene la oportunidad en los Pacers de estar en la conversación y mantener la cabeza enfocada en un objetivo durante todo el año. Indiana sabe que contrató a un gran competidor.

Sebastián Ciano
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