Referente del básquet de nuestro país, el base de Peñarol abordó otro costado deportivo: El futbolero. Fana del equipo que milita actualmente en la tercera división del fútbol argentino, pero que ya supo ser Campeón del Metropolitano 1969, Facu habló de su sentimiento por el popular Chaca.
Quizás el hincha “Funebrero” no lo conozca tanto. A pesar de que el básquet argentino tuvo una década maravillosa de la mano de la generación dorada, Facundo Campazzo es parte de la nueva camada de jugadores que vienen a reemplazar (y mientras tanto defienden juntos la celeste y blanca) a todos aquellos que lograron un fanatismo y una atención especial sobre un deporte que no era tan popular en nuestro país.
Facundo nació en Córdoba el 23 de marzo de 1991. Su padre, Ricardo, cuando era chico se hizo hincha de Chacarita cuando se enamoró de los particulares colores de la hermosa tricolor. Además tuvo la suerte de verlo campeón Metropolitano en 1969. Nuestro día más glorioso. Esa pasión supo transmitírsela a su hijo, que desde un primer momento se hizo un hincha enfermizo. Como lo saben ser los “Funebreros”.
“Mi viejo hasta tiene un tatuaje. Es hincha rabioso de Chaca. Yo crecí viendo al equipo del flaco Vivaldo, Carrario, el Mago Capria, Rivero. Cuando jugó en Primera. Y ese año cuando subió jugó en Córdoba contra Instituto, que perdimos 3 a 0, y recuerdo que lo fui a ver”.
Facu, que nació en el barrio Alta Córdoba, es una zona que está plagada de hinchas de Instituto. El estadio de la “Gloria” se encuentra allí a 10 cuadras de su casa. Sin embargo, Campazzo nunca tuvo apego con ningún equipo de la provincia. Su único amor, era el conjunto de San Martín.
En su rol profesional, Campazzo es uno de los mejores bases del básquet argentino. Juega actualmente en Peñarol de Mar del Plata, equipo multicampeón local y de varios torneos internacionales. Además, es una de las figuras del seleccionado. Jugó en el sub 18 y el sub 19, hasta que su mayor momento llegó cuando Julio Lamas, actual entrenador del equipo argentino, lo convocó para los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Participó, y fue titular en varios partidos, en donde la selección terminó en cuarto lugar. Allí estaba, el orgullo “Funebrero”, entre Ginobili, Scola, Delfino y los jugadores más importantes de la historia del básquet nacional. En un partido amistoso previo al comienzo del certamen olímpico, le metió un tapón impresionante al estadounidense Kobe Bryant, estrella mundial e icono de los Los Ángeles Lakers, equipo de la NBA, y que mide 30 centímetros más que él.
Desde 2005 que vive en la ciudad balnearia, ciudad de donde es Peñarol, su actual equipo, cada vez que “Chaca” viajó para enfrentar a Aldosivi, Facundo se hizo un espacio para ir a verlo. Y por intermedio de las redes sociales, la gente comenzó a conocer el club del cual Campazzo era hincha. En su twitter y facebook personales suele subir canciones “Funebreras” lo que provoca la bronca de todos sus seguidores que no son hinchas del “Tricolor”. Pero también tiene momentos gratos, como el que le tocó vivir con Alejandro Pérez, periodista de básquet de Canal 7 que transmite a la selección: “Una vez me lo encontré y me preguntó si era hincha de Chacarita, le dije que si y el me confesó que también era fanático. A partir de ahí nos hicimos amigos, hablamos del club, lo seguimos. En la calle la gente me pregunta porque soy hincha de Chaca, siendo que nací en Córdoba y encima vivo en Mar del Plata”, se ríe Facu.
Facundo tiene un deseo, conocer el nuevo estadio de San Martín, debido a la distancia nunca pudo venir ni tampoco conocer el anterior de tablones. Sin embargo los partidos que fue a la cancha fueron aquellos donde el “Tricolor” jugaba en su provincia natal. Fue en uno de esos cotejos donde conoció al “Flaco” Vivaldo, uno de sus grandes ídolos: “Me acuerdo de un partido que jugamos con Talleres y perdimos 1 a 0. No podía creer cuando lo saludé a Jorge. Fui a una iglesia donde daba una charla, y me acompañó mi papá (Vivaldo es evangelista y suele dar charlas religiosas). Recuerdo que lo durmió a mi viejo cuando el flaco le empezó a hablar (se ríe). Tengo la cuenta pendiente de conocer la cancha, y ver en vivo a la hinchada. Quiero cumplir ese sueño”.
De todos los partidos que lo marcaron, Campazzo recuerda aquella definición contra Defensores de Belgrano, donde su ídolo, Jorge Vivaldo, se vistió de héroe para salvar a Chacarita del descenso en una definición por penales para el infarto. “Me acuerdo que el flaco atajó solo por ese partido. Ese día tenía que jugar y no me quería ir de la concentración. No lo podía creer, me largué a llorar”, se sincera.
Cuando la charla termina, lo despedimos a Facundo quién vuelve a realizar un pedido. Conocer la nueva cancha del “Tricolor”. Aunque aclara que “quiero ir a la popular con la hinchada, nada de platea”.
Facundo se retira, se encuentra con sus compañeros a quienes les muestra orgulloso la camiseta que le regalamos. La sonrisa se le nota en el rostro, es un hincha genuino, como lo somos todos los que amamos el rojo, blanco y negro.
Mucha suerte “Facu” a partir de ahora tenes muchos miles de hinchas más.