Dos caras en un juego

Perder le duele a cualquiera. Pero también hay formas en las cuales se puede hacer. Si era la de la etapa que abrió el juego, salvo los cinco iniciales, era pésima la imagen. Si uno se queda con lo que demostró cada integrante del plantel cuando la naranja volvió del entretiempo, era una fotografía como la que se vio en el Fortín, a aplauso cerrado. La realidad es que el frío 78-75 no dice que en el cierre Lucas Pérez intentó sin suerte un tiro de tres que ponía todo en parda. Sigue perdiendo el equipo de Las Morochas (1-5), se sigue alejando de la zona de play offs, aunque muestra que tiene con qué salir. Deberá despertarse pronto.

El primer cuarto del partido demostró que Argentino no iba a rendirse, al menos hasta dejar todo lo que tenía para dar. Más allá de esto, volvió a chocar contra la constelación de estrellas con las que cuenta Peñarol. Por ejemplo, Leonardo Gutierrez con una gran inspiración (4/6 en cancha) no dejó que el Azul se termine de acercar. Claro, no sólo el 10 estaba iluminado: Facundo Campazzo hizo todo para habilitar una y otra vez a sus compañeros, Adrián Boccia fue el que más jugo le sacó.

Además,con las bombas a las cuales el Milrayita tiene acostumbrado a todos borró de un plumazo el esfuerzo de los de Adrián Capelli. ¿La efectividad? Tremenda: 6/7 desde 6,75. Por lo que se reflejó un 32-17 al momento del descanso de los minutos iniciales.

Poco se modificó en el segundo parcial. De hecho, la visita clavó dos bombazos que lo llevaron a sacar una tremenda ventaja pensando en todo lo que restaba (7:10) y el de Mar del Plata con 8/10 en zona externa logró irse 40-22.

Lógicamente con este contexto, más las lesiones de Franco Balbi y de Juan Cangelosi, las esperanzas comenzaron a esfumarse pronto. Ni hablar que esa sensación se hizo real una vez que la distancia pareció ser irremontable tras que Gutierrez queme la red como toda la noche (33-56).

Si bien la cara defensiva se modificó en comparación a la etapa inicial (recibió 12 unidades) , la brecha resultaba prácticamente imposible. Por eso, a pesar del cambio y la tremenda efectividad ofensiva, terminó yéndose 12 abajo (68-56) luego de un doblazo de Campazzo en el cierre. Marcos Saglietti lideró en el Turco a la hora de atacar con sus siete puntos.

De esta manera, con la historia que casi cambia Argentino, sufrió el elenco de Las Morochas otro cachetazo en lo que va de la Liga Nacional de Básquet. Es que las oportunidades que tuvo se las ganó pero también tardó 20 minutos en reaccionar. Termina siendo para destacar por el rival y la forma en la que cayó: dejando lo que tenía para dar y más, aunque eso no le alcanza para sumar de a dos.

Síntesis
Argentino (75) : Lucas Pérez 14, Marcos Saglietti 12, Santiago Arese 17, Marcus Melvin 18, Anthony Myles 6 (FI) Andrés Landoni 4, Emiliano Basabe 4, Martín Delgado 0. Dt: Adrián Capelli.

Peñarol (78): Facundo Campazzo 12, Adrián Boccia 13, Franco Giorgetti 0 (x), Leonardo Gutiérrez 21, Martín Leiva 16 (FI) Axel Weigand 8, Gabriel Fernández 2, Isaac Sosa 6. Dt: Fernando Rivero.

Progresión: 17-32, 33-56, 56-68 y 75-78
Árbitros: Ramallo-Aluz
Estadio: Fortín de las Morochas (Junín)
Crónica: deportedejunin.com.ar