Williams al rescate

Fue uno de esos partidos que quedan en la memoria colectiva de la gente. Porque son emocionalmente muy fuerte, y no por la paridad de tres suplementarios, sino por los vaivenes del tanteador violentamente oscilantes que hubo. Fue además el partido que marcó el debut absoluto de Karina Bacarelli como nuevo árbitro de la Liga Nacional ( y lo hizo muy bien).

Lo traía tranquilo Olímpico y ganaba por 26, pero nunca imaginó que Quilmes podría apurar a puro gol para empatarle el juego en solo 9 minutos.

El partido tuvo un ganador porque entre los dos equipos había un jugador distinto. Dejó una reserva de energía para dar hasta la última gota y jugó de arquero en defensa y de centrodelantero goleador en ataque en el último suplementario. Cuando todos cayeron en sus energías, emergió Justin Williams para ponerle nombre al ganador de un juego increíble.

Olímpico comenzó mandando en el partido, con más intensidad y el camino más claro hacia el aro rival (7-0). Le costó 3 minutos y medio a Quilmes abrir el marcador, pero mucho más le costó defender. Con Olímpico metiendo de todas las posiciones con Giorgi y Christmas, tanto en tiros de penetraciones como triples. Hasta que llegaron los puntos de ataque rápido (12-2 a falta de 5.30) y llegó el primer minuto pedido por Bianchelli.

Si bien un triple de Clemente le dio distancia de 11 (15-4) Quilmes fue despertando lentamente de su letanía en ataque y empezó a arrimar puntos con su perímetro y sobre todo Eric Flor. Hasta cerrar 24-16 con el despertar de Justin Williams en el partido.

El segundo cuarto abrió con un parcial de 8-0 para el local que sacó una máxima de 16 (32-16) para que Bianchelli tenga para frenar otra vez el juego. Tintorelli entró de ala pivote y Olímpico hizo abuso del doble poste alto para sacar ventajas bien cerca del canasto, lastimando a Quilmes donde más le duele.

Encima el cervecero no podía contestarle con su tiro perimetral (2/14 hasta allí) y ni siquiera tenía la chance de correr el contraataque. La defensa de la visita corrió de atrás sin tener chance de ponerse firme en su tabla y el equipo bandeño utilizó muy bien la conexión con Williams.

Después del minuto Quilmes fue a zona y con dos dobles seguidos y un triple de Cantón recortó distancias (32-23). Capelli detrás del minuto hizo volver rápidamente a Stanic pero el partido entró por un rato en equilibrio. Basabe por un lado y Stanic por el otro marcaron el ritmo (39-28)

Pero otra vez Cantón fue factor para achicar a 6 (39-33). El segmento lo cerró mejor Olímpico con dos defensas seguidas, un libre de Clemente, un doble de Giorgi y un triple de Stanic para tomar renta de 12 (45-33) al cierre del primer tiempo. Mientras el local disfrutaba al lado del aro (12/18 en dobles) Quilmes penaba por su tiro abierto (4/17)

El tercer cuarto fue todo de Olímpico, que anotó consistentemente en casi todos los ataques del parcial (5/5 en triples y 5/9 en dobles) para manejar siempre desde su ofensiva el ritmo del partido. La defensa de Quilmes definitivamente no hacía pie en el juego y sufría la efectividad del local que ganó el segmento 27-20.

Entre Clemente, Machuca y Christmas atacaron muy bien la decisión de Quilmes de pasar por detrás de los pick y liberar los tiros. El cervecero trató de generar tráfico en la pintura, aglutinar gente atrás para contener a Williams y los tiros abiertos agujerearon la defensa.

Apareció un poco Ricky Sánchez y Quilmes repartió el goleo pero no pudo hacer mucho. Bajo de 23 a 20 (73-53) la distancia para entrar al último cuarto.

El cuarto final abrió con un pasaje mágico de Maxi Stanic para parcial 6-0 (79-53) y minuto de Bianchelli. Hasta allí llegó la máxima de 26 puntos. Faltaban 9 minutos para que termine el partido y había un equipo que dominaba a voluntad el juego.

Olímpico fue un rato a zona y un cachetazo ofensivo de Basabe comenzó lo que sería una reacción formidable. Olímpico tiró un par de triple para mantener la ventaja pero los erró. Quilmes balón en mano abrió la cancha y entre Ferreyra y Flor construyeron un parcial de 1-13 (80-66) para que Capelli pida minuto.

Volvieron Clemente y Christmas pero el local siguió confundido. La defensa de Quilmes mejoró se puso muy activa para cerrar penetraciones y los tiros largos de Olímpico dejaron de entrar. Por el contrario apareció el triple de Quilmes: esa arma devastadora que el cervecero suele tener. Dos triples de Ricky Sánchez, otro más de Ferreyra achicó los márgenes (82-77) con parcial 3-24 a falta de 3:30

Más allá del triple de Giorgi (85-77), Quilmes no se cayó, ya estaba embalado y siguió jugando muy suelto con Basualdo atacando de cerca y Flor haciendo de todo hasta poner el 85-82 a falta de 1:17. Quilmes tenía la bola para empatar pero Ferreyra pisó afuera y el cierre le quedó servido a Olímpico que hizo todo lo posible por no cerrarlo bien.

Tintorelli metió dos libres (87-82 a falta de 58 segundos) pero Eric Flor metió un bombazo de su estilo para cerrar otra vez el juego (87-85 a falta de 51 segundos). El cierre (el del tiempo regular) fue dramático. Quilmes tiró dos triples para ganar el juego pero los erró y le metió falta a Stanic a falta de 11 segundos. El base local metió solo el primero (88-85) y Quilmes salió rápido, pero Flor fue cortado con falta. Como no estaba en penalización la visita repuso de costado con 3 segundos Flor clavó un triple inverosímil para empatar en 88 y mandar todo a suplementario. Fue 15-35 finalmente el registro del último cuarto. Increíble para la clase de partido de los primeros tres segmentos.

En el primer suplementario otra vez comenzó dominando Olímpico con Giorgi haciendo de todo para su equipo más dos libres de Stanic se puso arriba por cinco (94-89) pero Quilmes no se rindió y con basabe y Basualdo se puso a uno (94-93), otra defensa buena y un libre de Ricky Sánchez para el empate en 94. Machuca metió un golazo con falta (96-94) pero erró el adicional. Luego Williams erró otros dos libres para que Basabe con tiros libres ponga el 96 iguales (y la polémica de la noche). En la última jugada, la perdió Machuca y Basabe en la contra tiró un triple de frente para ganar que quedó corto.

En el segundo suplementario ya jugaba no solo el cansancio sino también las ausencias. Lentamente Quilmes fue perdiendo a Basualdo y luego a Ricky Sánchez y obligó a Bianchelli a reconfigurar el equipo, que tiene a Cantón saliendo de un esguince de rodilla.

Con un doble de Ferreyra por primera vez en todo el partido Quilmes pasó al frente (96-98). Desde allí hasta el cierre de ese adicional emergió la figura de Justin Williams. Entre él y Clemente atacaron muy bien el canasto rival con potentes mandadas. Quilmes no tenía forma de contenerlos.

No obstante aguantó con gol de los tiros abiertos (triples de Canton y Ferreyra) pero el base cervecero erró un tiro solo y Machuca en la contra no lo perdonó anotando otro triple (108-105). Apareció rápido Cantón con un doble a falta de 47 segundos (108-107) pero Tintorelli sacó provecho en el poste bajo (110 – 107) aunque erro el adicional. Cantón erró triple y Ferreyra cortó con falta a Machuca que solo metió el segundo simple (111-107 a falta de 13 segundos). Olímpico no podía cerrarlo y dejaba siempre con vida a su rival.

Enzo Ruiz ensayó un triple y Clemente le cometió falta. El santiagueño metió los tres tiros libres a falta de 9 segundos (111-110) y luego Christmas metió otra vez uno solo. En la corrida del final Flor fue detenido con falta y metió ambos simples para un nuevo empate: 112-112

El tercer suplementario era todo un cúmulo de cansancio y nervios. De stress por una situación surrealista y vértigo por no poder frenar el balón. Fueron y vinieron chocándose todo hasta que a falta de 2.30 llegaron los primeros puntos con una volcada de Williams (114-112) (que otra vez erro el adicional). No conforme después de un recupero Giorgi erró otros dos libres más a falta de 1.19 y Cantó castigó con un triple (114-115). Pero el base Jonathan Machuca rompió muy bien y habilitó a Williams (116-115) que la enterró con fuerza a falta de 49 segundos.

Todos los últimos embates de Quilmes fueron rectos para el aro. Con decisión. Y todos chocaron con Williams, que levantó una muralla fenomenal, que metió 3 tapas en el suplementario y dos volcadas tremendas para marcar la exigua diferencia, y que en definitiva termina decidiendo el ganador.

Quilmes tiró varias veces para ganar, levantó en 9 minutos un juego que perdía por 26 y no tuvo la puntada del final. Le faltó un tiro ganador. Pero no jugó bien por tres cuartos y lo termina pagando con la derrota. Se acordó tarde y luego apeló a sus recursos anímicos para poder lavar culpas.

Olímpico por el contrario jugó bien y se durmió de tal modo que casi le da lugar a un golpe terrible. Lo evitó sufriendo hasta el final, con Justin Williams como bandera y regalando el juego más emocionante de la temporada en la Liga Nacional.

Pablo Tosal - @pablotosal - Pick&Roll
Fotos: prensa Olímpico