Curry no tuvo piedad

Stephen Curry busca alargar la temporada de sus Warriors al menos hasta los play-in, como así también volver a ser el máximo anotador de la NBA. Por el momento, todos sus objetivos están cumpliéndose.

El base de los Warriors volvió a tener una actuación descollante para que Golden State derrote fácilmente al Thunder de Gabriel Deck por 136 a 97. El actual líder anotador de la 2020/21 terminó la noche nada menos que con 49 puntos, producto de 3/5 en dobles, 11/21 en triples y 10/10 en libres, 5 rebotes y 2 asistencias en 29 minutos (si, tres cuartos).

Curry parece tener algo personal ante el Thunder: En los tres partidos que los enfrentó esta temporada se despachó con 42, 34 y 49 puntos, y en todas las oportunidades alcanzó cada cifra en los primeros tres cuartos de acción; en total fueron 125 tantos en 67 lanzamientos, con 28 triples convertidos. Demencial. Además anotó 30 o más puntos en 19 de sus últimos 21 partidos.

Esta noche Curry salió “a matar” desde el inicio: Clavó 24 puntos durante el primer cuarto, lo que significó el partido número 34 de su carrera con al menos 20 tantos en un período. Hoy lo hizo dos veces, ya que durante el tercer chico hundió otros 5 triples para un total de 22 tantos.

Los de Steve Kerr comenzarían con su partido histórico detrás de la media luna desde temprano al encestar 6 en los primeros doce minutos. Su equipo, además de contar con un Curry incontrolable lograba correr la cancha a gusto, como así también pasar fácilmente el balón en la pintura ante cada corte.

El Thunder, por su parte, tuvo como principal arma las arremetidas de Darius Bazley (7) y Luguentz Dort (8), quien finalmente fue de la partida. Ambos terminaron la velada con 11 y 16 tantos, respectivamente. Sin embargo, era muy poco para la gran diferencia que hubo entre ambos equipos.

Gabriel Deck estuvo en cancha durante 20 minutos en los cuales no logró entrar en ritmo ofensivo (el juego del Thunder no lo favoreció), aunque sí intentó aportar a la hora de darle continuidad y fluidez a cada ataque. También se lo notó metido en defensa, tanto a la hora de defender a Juan Toscano-Anderson como en los pasajes en el que le tocó emparejarse con Nico Mannion. El argentino cerró su planilla con 4 puntos (todos en el último cuarto), 3 rebotes y 3 recuperos.

Luego de un cuarto inicial demoledor por parte de los locales, los dirigidos por Mike Daigneault (21-47) jamás pudieron hacer pie ni regresar al juego. Todo fue de Curry y sus Warriors para ir incrementando los números: Los 27 triples anotados por los de San Francisco - 54 intentos - son un récord de franquicia.

Draymond Green también tuvo una destacada labor con 15 puntos y 13 asistencias, mientras que Andrew Wiggins aportó 18 tantos, Toscano-Anderson sumó 12 más 9 rebotes y 5 asistencias desde el banco, al tiempo que Jordan Poole añadió otros 16 puntos como suplente.

De esta manera los Warriors continúan prendidos en la lucha por continuar jugando más allá de la temporada regular. Por el momento se mantienen octavos en la conferencia Oeste, por lo que accederían a jugar el play-in (estarían enfrentando a los Lakers).

En Oklahoma City otros cuatro jugadores finalizaron en doble dígito: Jaylen Hoard y Kenrich Williams aportaron 13 puntos desde el banco, Svi Mykhailiuk sumó 17 al tiempo que Theo Maledon anotó 10 tantos.

En el horizonte del Thunder restan cuatro partidos más antes de entrar en vacaciones: Dos frente a Sacramento, Utah y Clippers. Será un período de suma importancia para Deck en su objetivo poder demostrar que todo lo bueno que hizo hasta ahora no fue casualidad y así ganarse en la cancha esos tres años que le restan a su contrato.

Sebastián Ciano
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