Ingrese texto de busqueda

20/10/2010 02:58 | NBA

División Southwest

Autor:Sebastián Ciano (sciano@pickandroll.net)

Dallas Mavericks

Comenzará otra temporada en la que los Mavericks intentarán demostrar que son un equipo con serias intenciones de llegar a la final. Desde aquella definición perdida en 2006 ante los Miami Heat, y la estrepitosa caída en primera ronda de 2007 frente a los Golden State Warriors luego de haber sido el mejor récord de toda la NBA (67-15), Dallas se ganó una imagen negativa en la liga, y todo el talento de su plantel nunca parece alcanzarle para lograr el gran objetivo.

Pues en la 2010/11 no se caracterizarán por el perfil bajo, sus figuras continúan y la plantilla no tiene nada que envidiar a la de ningún otro equipo. En el verano apuntaron principalmente a la renovación de su líder, Dirk Nowitzki, quien en vez de jugar para su selección en Turquía viajó hacia su Alemania natal con el fin descansar y pensar. Por suerte para la franquicia texana, su futuro coincidió con el de los Mavs.

Jason Kidd una vez más dirá presente para gastar los últimos cartuchos que le quedan (entra en su 17ª temporada), mientras que un Caron Butler con más tiempo en el equipo (llegó a mediados de la 09/10) le dará a los Mavs más opciones; Asimismo, Rick Carlisle cuenta con el gran aporte de Jason Terry, un titular que juega de suplente en Dallas, como así también con Shawn Marion, a quien quizás este año se lo vea arrancando desde el banco, rol al cual - según sus propias palabras - no tendría problemas en adaptarse.

Esto podría vincularse con el arribo del pivot Tyson Chandler, reboteador y defensor. Con él, el equipo tendrá cuatro centros para un lugar (está Brendan Haywood más otros dos nuevos como Ian Mahinmi y Alex Ajinca), por lo que el platel se alargó, y como consecuencia Carlisle no necesitará improvisar forzando a sus jugadores en otra posición. Veremos si esta vez los Dallas Marevicks consiguen avanzar más allá de la segunda ronda de los playoff.

Houston Rockets

Con la vuelta de Yao Ming tras una temporada de ausencia, los Rockets vuelven al ruedo con el ánimo revitalizado, con otro semblante. Lejos de los incómodos planteos de Tracy McGrady, los dirigidos por Rick Adelman nuevamente serán considerados como un equipo a tener en cuenta en la conferencia Oeste y en la siempre complicada división Southwest, que comparte con sus “vecinos” Spurs y Mavericks.

Ya no hay rastros de dolor en el pie de Yao, sin embargo el cuerpo técnico de Houston ya avisó que el chino jugará un promedio de 24 minutos por juego; Ya no quieren sufrir más sobresaltos con su pivot y máxima figura, por lo que intentarán cuidarlo lo mejor posible para que llegue diez puntos a la postemporada.

Como siempre, la dupla interior estará completa con la presencia de Luis Scola, que junto a Kevin Durant fue la máxima figura en el mundial de Turquía. Desde hace tiempo el Luifa se ganó un lugar en el equipo y el respeto de toda la liga, que ya lo conoce y sabe que no se trata de un jugador de rol, sino que técnicamente puede jugar ante cualquiera. Con el retorno de Ming quizás goce de más oportunidades para lucirse en la pintura, aprovechando espacios tanto en ataque como a la hora de cargar al rebote.

Este año en juego interior se completará con la llegada de Brad Miller, un cuatro/cinco (2,13 mts) que también tiene la capacidad de jugar de frente al canasto y de tomar disparos a media y larga distancia. El ex Chicago, Charlotte y Sacramento firmó para Houston junto a Courtney Lee, llegado en el intercambio entre tres equipos que envió a Trevor Ariza a New Orleans.

Este cambio quizás no tenga que ver solamente con el nivel del alero con la camiseta de los Rockets: Lee, que ya jugó la final de 2009 - como titular - para los Orlando Magic, también posee una buena defensa perimetral y una mano precisa desde tercera dimensión, con la diferencia que es un jugador más joven y barato que Ariza. Será un buen reemplazante para Kevin Martin, una de las armas principales de Adelman. Mientras tanto, la media cancha se completa con dos bases de similares características como Aaron Brooks y su suplente Kyle Lowry (renovó), quienes le dan identidad al equipo. Otra adhesión interesante de los Rockets es la del rookie Patrick Patterson, quien pueda llegar a ser lo que en algún momento significó Carl Landry, aunque primero deberá adaptarse al profesionalismo.

Memphis Grizzlies

El equipo que dirige Lionel Hollins no tiene muchas expectativas de gran cambio para la 2010/11, sobre todo por la cantidad de buenos rivales que existen en su división. El principal objetivo será el de mejorar la campaña realizada el año pasado, en la que alcanzaron 40 victorias. Para ésta, proponerse un récord positivo no estaría nada mal.

Durante el receso lograron volver a firmar a Rudy Gay, uno de sus jugadores más importantes, quien fuera agente libre en el verano estadounidense. Él, junto a Marc Gasol, son los jugadores de mayor jerarquía del plantel y representan la columna vertebral de los Grizzlies, que se completa con una media cancha joven integrada por Mike Conley Jr en la base, y O.J Mayo como escolta. En su tercer año en la NBA, el ex USC deberá al menos revalidar lo que mostró en los primeros dos (18 pts, 44.8% de cancha, 3.8 reb y 3.1 asist).

Memphis tendrá pocas caras nuevas para esta temporada, y se ha focalizado en la media cancha. Llegaron los bases Tony Allen y Acie Law, quien jugó para tres equipos distintos en la 09/10; Asimismo estará Xavier Henry, escolta de la universidad de Kansas, que fue seleccionado en la duodécima posición del draft (13.4 pts, 41.8% en triples).

Para jugar bajo los tableros además de Gasol está Zach Randolph, una de las principales vías de gol para Hollins. El año pasado promedió 20.8 puntos, 11.7 rebotes en 37.7 minutos a través de los 81 partidos que disputó. El talón de Aquiles estará en el poco recambio, ya que hasta el momento los Grizzlies no han encontrado respuestas de sus dos hombres más grandes: El iraní Hamed Haddadi (2 ppp y 2.2 rpp en dos temporadas) y Hasheem Thabeet (3.1 ppp y 3.6 rpp), quien siendo el número 2 del draft de 2009 fue enviado a la Liga de Desarrollo de la NBA.

New Orleans Hornets

Cuando en las semifinales de conferencia de 2008 los Hornets tuvieron en jaque a los San Antonio Spurs se pensó en que una nueva potencia nacía en el Oeste. Sin embargo, tras la caída en primera ronda al año siguiente (Denver), más algunas lesiones y la salida de Byron Scott en la 09/10 los Hornets no lograron prosperar en el armado de un equipo “emblema”. Por esta razón ahora será barajar y dar de nuevo para el equipo que dirigirá Monty Williams a partir de esta temporada.

El receso no fue muy tranquilo en New Orleans ya que en medio del agitado mercado de agentes libres Chris Paul se hizo notar y declaró que le gustaría ser transferido, lo que encendió todas las alarmas en la franquicia de Louisiana.

Finalmente, el base decidió dejar el asunto en “stand by”, los medios de comunicación poco a poco se fueron “olvidando” para darle paso a un clima más proclive al buen trabajo.

New Orleans decidió desprenderse de jugadores que de alguna manera habían sido importantes, como Darren Collison - vivió su temporada de novato – y el veterano Morris Peterson. En su lugar llegaron Marco Belinelli, Willie Green y Trevor Ariza, la mayor adquisición, quien seguramente haga las veces de escolta pensado en una formación que incluya a Stojakovic de alero, David West de cuatro y Okafor de cinco.

Todo dependerá de lo que pueda realizar dentro del rectángulo la dupla Paul-West, máximos referentes y goleadores del equipo en 4 de las últimas cinco temporadas (West estuvo al menos segundo en las últimas 5). Solo con ambos en su máximo nivel los Hornets podrán pensar en regresar a la postemporada.

San Antonio Spurs

Todo San Antonio está esperando que sus Spurs vuelvan a meterse entre los mejores equipos de la NBA nuevamente luego de haber sido relegado, gran parte por culpa de las lesiones, en la última campaña. Gregg Popovich apuesta al crecimiento de sus jugadores jóvenes y la plenitud físicas de sus máximas estrellas: Manu, Tim Duncan y Tony Parker. Sabe que con el “monstruo de tres cabezas” sano todo es posible.

Para la 2010/11 los Spurs no tuvieron variables muy notorias en su plantel. Se destaca la llegada del brasileño Tiago Splitter, quien si bien deberá atravesar el ineludible período de adaptación que la NBA les impone a sus debutantes, será una pieza muy importante a mediano plazo, sobre todo a la hora de cuidar las tan maltratadas rodillas de Duncan a medida que la fecha de los playoff comience a acercarse.

Le renovaron el contrato a un viejo conocido como Matt Bonner, que siempre aportó a la causa, como así también a Richard Jefferson, en lo que fue una decisión cuyo “rebote” perduró un par de días en los medios debido a la floja 09/10 que había tenido. No obstante, “Pop” le renovó la confianza y el jugador tuvo la claridad como para renunciar a un jugosísimo contrato (15 millones de dólares) para cobrar menos a cambio de uno más duradero (39 millones por 4 años) teniendo en cuenta que sus piernas no son las misma que tenía cuando llegó a la NBA, allá por 2001, aunque afirman que está en una gran forma física.

Este año, jugadores como George Hill y DeJuan Blair serán fundamentales en la rotación de los Spurs. El base le dio varias satisfacciones a la franquicia texana tanto de armador como de escolta, organizando y anotando, sobre todo cuando las lesiones dejaron marginados a Manu y Parker. Blair, por su parte, fue un hallazgo en el pasado draft (posición #37, segunda ronda) y alcanzó momento de gran nivel a través de la temporada.

Este año se hablará mucho de la continuidad del francés Parker, quien se encuentra en la misma posición en la que Ginóbili estuvo hace un año: Atraviesa el último año de contrato y hasta el momento no se sabe su futuro. Por ahora éste está ligado a los Spurs, que querrán ir nuevamente por el anillo que no consiguen desde 2007.

Sebastián Ciano
Twitter: @Seba_Ciano

www.picandroll.com.ar